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El Senado de EE UU da un primer paso hacia la adopción de represalias

El Comité de Relaciones Exteriores del Senado estadounidense, presidido por el republicano Richard Lugar, dio ayer el primer paso efectivo para la imposición de sanciones contra el Gobierno racista de Suráfrica, al aprobar, por 15 votos contra 2, un paquete de medidas de presión. Las medidas, económicas y diplomáticas, relativamente moderadas, tiene buenas perspectivas en una próxima votación en el pleno del Senado, dada la personalidad política de sus patrocinadores.Sin llegar al radicalismo de la Cámara de Representantes, que votó en el mes de junio una virtual ruptura de los lazos comerciales con Suráfrica, las sanciones decididas ayer tienen su importancia.

La resolución, que al ser aprobada tendrá fuerza de ley, prohíbe toda nueva inversión o préstamo bancario a Suráfrica, así como las importaciones de uranio y carbón de ese país. También, y quizá más efectivo a corto plazo, recomienda al presidente la venta de reservas de oro en el mercado internacional con objeto de deprimir el precio del metal precioso, una de las principales fuentes de divisas para Pretoria. Otra medida, de carácter diplomático, es la suspensión de los derechos de aterrizaje de las aerolíneas surafricanas.

El proyecto de ley auspiciado por Lugar establece un plazo de un año, tras el cual pone a disposición del presidente toda una gama de nuevas sanciones. Para evitar que esta espada de Damocles caiga sobre su país, Botha tendría que liberar a todos los presos políticos, incluido Mandela.

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