Proyecto y sentido común
Resulta que en la provincia de Cuenca, en el valle del río Cambrón, un lugar bastante inaccesible, se va a llevar a cabo un "ambicioso proyecto de urbanización" para convertirlo en "un centro para el turismo de elite", "con chalés adosados", y transformando una antigua ermita de los carmelitas descalzos "en un hotel de lujo", procediéndose además a una "reordenación de la vegetación, que se encuentra muy descuidada" (cito frases textuales aparecidas en un informativo regional). Dentro de poco España será un poco más fea; un sitio que ahora es bonito, que rebosa vida animal y vegetal, tendrá dentro de poco piscinas, campos de golf y chalés... y aguas contaminadas, vertederos de basuras, pinos de repoblación, con los consiguientes incendios, y un largo etcétera. No pretendo defender una situación idílico-naturista, ni el derecho de los animales y plantas a vivir -que creo que lo tienen-. Al contrario, creo que ese proyecto perjudica a los seres humanos (incluyo los que ganan dinero con él). La naturaleza no es menos natural si en vez de consistir en un sabinar con un río de agua clara poblado por muchas especies animales y vegetales consiste en un monótono campo de golf cercano a un basurero poblado por rollizas ratas grises y recorrido por un río eutrofizado y maloliente.El único ser vivo capaz de apreciar que ahí ha tenido lugar un desastre es el ser humano, y es el único que podría impedirlo, pero también tiene la falta de sentido común suficiente para creer que las ganancias a corto plazo justifican ese tipo de acciones.-
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