El Senado aprueba una primera versión de la mayor reforma fiscal de la historia de EE UU
El Senado de los Estados Unidos aprobó ayer por 97 votos contra 3 un proyecto que se califica de histórico para realizar una profunda reforma fiscal. De acuerdo con el texto inicialmente aprobado por la Cámara alta, los índices tributarios para las personas fisicas se reducirán a su más bajo nivel en los últimos 50 años, mientras que las grandes empresas y las entidades comerciales, en general, verán elevados sus impuestos.El proyecto de ley debe presentarse ahora ante un comité conjunto del Senado y de la Cámara de Representantes, para que éstos reelaboren una nueva versión de compromiso de la medida y pueda convertirse en ley. La Cámara de Representantes había aprobado el año pasado una versión de reforma fiscal más moderada que la del Senado. Aunque cabe esperar una laboriosa negociación entre los legisladores, todos los observadores coinciden en que para septiembre la ley debería haber sido aprobada y estar lista para su firma por el presidente Reagan.
La ley supondría una reducción de los impuestos para el contribuyente, compensada con más de 100.000 millones de dólares (unos 14 billones de pesetas), en que aumentaría la imposición a las empresas. El texto legal no sólo reduce el índice impositivo sobre los ingresos personales, sino que elimina gran número de situaciones en las que los más privilegiados pueden acogerse a la deducción de impuestos, como es el caso de comidas de negocios u otros gastos de representación. También cierto tipo de inversiones cuyo único fin es facilitar la exención fiscal entraría en el ámbito de la ley. La medida afectaría a lo que en el lenguaje político norteamericano se califica irónicamente de comidas de tres martinis, aquellas en las que la cuenta se desborda generosamente por las razones citadas.
De acuerdo con el proyecto del Senado las actuales 14 categorías para el cálculo del impuesto sobre la renta se reducirían a dos únicos índices de un 15% y un 27% mientras que en la actualidad los baremos van desde el 11 % al 50%. Por su parte, la Cámara de Representantes aprobó un plan que establece cuatro categorías de un 15% a un 38%. Se calcula que seis millones de contribuyentes de bajos ingresos dejarían de pagar impuesto sobre la renta y que otros muchos millones, hasta un 80% de contribuyentes, entrarían en la categoría de menor impacto fiscal.
El senador Bob Packwood, republicano de Oregon, que preside el comité financiero de la Cámara alta, dijo ante los legisladores, antes de procederse a la votación, que el país quedaría agradecido al Senado por su decisión. El presidente Ronald Reagan apoya fuertemente la iniciativa de las dos Cámaras y hace pivotar el eje político de su segundo mandato sobre esta reforma, que ha llegado a calificarse de segunda revolución americana.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.