El Banco Mundial debe aumentar su protagonismo para resolver la crisis de la deuda
El Banco Mundial debe desempeñar un papel más activo en la crisis de la deuda exterior, según un informe de un grupo de expertos dado a conocer en Washington. Las dificultades generadas al sistema financiero mundial por los países en vías de desarrollo incapaces de pagar a los bancos las deudas asumidas han sido objeto de debate en la 72ª Conferencia de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que ha aprobado una resolución para convocar una conferencia internacional que intente dar soluciones al tema.
El próximo presidente del Banco Mundial, Barber Conable, que tomará posesión de su cargo el 1 de julio, deberá asumir un protagonismo activo en el tema de la deuda exterior, cuya crisis amenaza la estabilidad del sistema financiero mundial, según un informe de expertos hecho público ayer en Washington. Conable fue congresista en representación del partito Republicano por Nueva York hasta 1984 y ha sido propuesto para el nuevo cargo por el presidente de Estados Unidos, Ronald Reagan.Los expertos opinan que sólo una actitud enérgica y con sentido de la dirección puede evitar los males económicos derivados de una deuda exterior que asciende actualmente a un billón de dólares (142 billones de pesetas). Para hacer frente a los problemas actuales, el Banco Mundial debe aumentar su capital en 100.000 millones de dólares (más de 14 billones de pesetas), lo que permitirá llevar a cabo una transferencia neta de recursos que permita a los países subdesarrollados invertir la situación actual de pagar más dinero del que reciben, lo cual no deja de aumentar sus problemas.
El Banco Mundial, según el estudio, debe ser "un coordinador de los flujos globales de capital, un mediador para las diferencias políticas y económicas entre el Norte y el Sur, un estabilizador de la economía y un centro intelectual para pensar sobre el desarrollo". Sólo si los países endeudados consiguen excedentes como para pagar sus compromisos asumidos puede pensarse en una solución que logre evitar la crisis en cadena de numerosos bancos occidentales.
Dependencia de EE UU
El Banco Mundial debe superar su situación de dependencia, con respecto al Departamento del Tesoro de Estados Unidos y al Fondo Monetario Internacional (FMI), "en la definición de estrategias para estimular el crecimiento", según declaró Feinberg, vicepresidente del Consejo para el Desarrollo de Ultramar. El informe sostiene que aunque el llamado Plan Baker, que contempla un aumento de 29.000 millones de dólares (412.000 millones de pesetas) en la financiación a conceder a los países deudores en los próximos tres años, es un paso positivo, se requieren medidas más decisivas.La resolución de la OIT para celebrar una conferencia sobre la crisis de la deuda exterior fue asumida, a propuesta de Venezuela, después de dos días de intensos debates. La resolución, no obstante, deberá ser aprobada el próximo martes, aunque después de las enmiendas introducidas se espera que sea adoptada por unanimidad.
El Banco Mundial aprobó el jueves conceder un préstamo de 529 millones de dólares a Brasil, el país más endeudado del Tercer Mundo, con 103.000 millones de dólares (más de 14,6 billones de pesetas). Los representantes de Estados Unidos y Japón se opusieron, al considerar que Brasil no se atiene a las reglas de desarrollo económico aconsejadas por el FMI.
El Gobierno de Bolivia acordó el viernes asumir un programa de ajuste económico con el Fondo Monetario Internacional, lo cual le permitirá recibir un crédito de 58 millones de dólares, que le servirá para hacer frente a sus compromisos de pago más acuciantes.
Por otra parte, se ha anunciado en Washington que las medidas económicas que adoptará el Gobierno argentino en los próximos meses permitirán que este país se convierta en el primer beneficiario del Plan Baker. Argentina ha solicitado un crédito urgente de 1.700 millones de dólares para atender a los servicios de una deuda que supera los 50.000 millones de dólares.
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