Bélgica, más lista que Dinamarca

España tendrá esta noche un difícil compromiso. Bélgica es un equipo más listo que Dinamarca y, por lo tanto, hay que jugar con mucha cabeza. El equipo belga tiene el mismo planteamiento táctico que Dinamarca, un 4-4-2, pero su estilo de juego es totalmente distinto y basa todo su potencial en el contraataque.Bélgica juega con cinco jugadores de mentalidad ofensiva; los dos delanteros, Claesen y Veyt, y tres centrocampistas, Ceulemans, Scifo -por la banda derecha- y Vercauteren -por la izquierda- Cuenta además con buenos marcadores centrales, Grun o Broos y De Mol. El primero es muy peligroso en su juego porque sube muy bien el balón, cabecea con peligro y aprovecha al máximo los espacios libres. Los dos laterales, Gerets -para mí, el mejor del mundo- y el joven Vervoot saben correr la banda y centran muy bien.

Detrás, Pfaff completa el excelente conjunto. Pfaff es uno de los mejores en su puesto y, a diferencia del soviético Dasaev, ha demostrado en varias ocasiones que es capaz de salvar a su equipo con sus intervenciones.

Ceulemans, el líder

El fútbol belga es muy rápido y peligroso en el contraataque, en el que Ceulemans ejerce las funciones de líder. Muy inteligente, Ceulemans sabe mandar en el equipo y acelerar el ritmo en el momento adecuado para sorprender al rival. Ceulemans tiene permiso del entrenador para jugar libremente por todo el campo. Muñoz lo debe saber, pero un marcaje por todo el campo es imposible porque Ceulemans es capaz de bajar a su defensa, llevarse consigo al marcador español y dejar un pasillo en el centro del campo que sabe aprovechar muy bien Grun. Yo siempre he elegido el marcaje por zonas. También procuraría cerrar el pasillo izquierdo, como ya hizo España ante Dinamarca, con un hombre que cerrase el paso a Scifo y otro, como Calderé, que tuviese espíritu ofensivo y que, al mismo tiempo, frenase las subidas del lateral Gerets. Delante, creo que Eloy permite una mayor libertad al juego de Butragueño.

Contra Bélgica, un entrenador siempre tiene dos posibilidades. Una, la conservadora, es aceptar el ritmo lento del juego belga y esperar alguna posibilidad de ataque. La otra, la valiente, la que más me gusta a mí, es dar la cara desde el principio, imponer la personalidad de tu equipo. Es un riesgo porque Bélgica sabe aprovechar muy bien sus oportunidades. Miguel Muñoz lo está haciendo muy bien y yo sólo me atrevería a aconsejar que España jugase con su estilo propio, con el estilo que tan buen resultado le dio en la segunda parte frente a Dinamarca, en la que vimos al auténtico equipo español, más veloz y más agresivo.

A estas alturas de la competición, lo más importante es mantener el juego y la personalidad del equipo y no depender del contrario. La baja de Goikoetxea es muy importante porque estaba jugando de forma sensacional, pero España puede recomponer la defensa y mantener su estilo de juego. Este es un partido en el que se puede lograr todo o nada, pero en el que hay que mantener siempre la cabeza fría.