Todos los militares presos deben recibir igual trato, según las nuevas normas

Los gobernadores militares de las prisiones castrenses deben exigir que en dichos centros reciban igual trato y estén sometidos al mismo régimen todos los reclusos, con independencia de su empleo o graduación, que estén cumpliendo condenas, según las normas internas que dictó el ministro de Defensa, Narcís Serra. Las normas fueron aprobadas en 1983 y no han sido difundidas. Por no cumplirlas, recientemente fue arrestado el gobernador militar de la prisión de Alcalá de Henares (Madrid).

En las misma normas se recuerda que es el gobernador de la prisión el responsable de que se cumpla el Reglamento de Prisiones Militares, en el que se indica que los militares recluidos podrán recibir diariamente visitas. En las normas del ministro, sin embargo, se especifica que a diario sólo, podrán recibir visitas de familiares directos, mientras los familiares de segundo grado sólo podrán ir a la prisión una vez por semana y los amigos sólo una vez al mes.

Cualquiera de las visitas citadas no podrá durar más de seis horas y, en cualquier caso, nunca podrán coincidir más de cuatro visitantes. Con respecto al uso del teléfono, las normas dadas por el ministro recuerdan que el gobernador militar de cada centro deberá autorizar o no cada una de las llamadas.