Indicios delictivos contra un ex asesor de Ronald Reagan

La Oficina General de Control del Congreso de Estados Unidos (GAO) recomendará que se iinvestigue la posibilidad de enjuiciar a un ex asesor del presidente Ronald Reagan, señaló ayer un alto funcionario de ese organismo. "Hay indicios de violaciones delictivas" del código de ética gubernamental norteamericano por parte del ex asesor Michael Deaver, dijo el funcionario, que solicitó permanecer en el anonimato.

"Vamos a remitir al Departamento de Justicia las acusaciones de conflicto de interés", para que allí se decida el nombramiento de un fiscal especial, añadió él funcionario en declaraciones a The Washington Times. Deaver es un amigo personal de Reagan y de su esposa, Nancy. Tras abandonar su cargo de consejero presidencial en la Casa Blanca fundó una empresa de relaciones públicas en Washington que hace de grupo de presión para Gobiernos extranjeros.El ex asesor ha sido acusado de negociar el nombramiento de un enviado especial para discutir con el Gobierno de Canadá el polémico problema de la lluvia ácida cuando todavía ocupaba el cargo de consejero de Reagan.

En el momento de la intervención de Deaver, la Casa Blanca oponía resistencia a las iniciativas canadienses orientadas a que Estados Unidos financiase un programa para combatir las emisiones de instalaciones industriales que contaminan la atmósfera.

Esas emisiones provocan lo que se conoce como lluvia ácida, una precipitación que contamina el ambiente y perjudica la vida marina y vegetal en el noreste de EE UU y la zona tronteriza de Canadá. La Administración de Reagan accedió al nombramiento de un enviado especial y a la creación de un programa para combatir la lluvia ácida tras la intervención de Deaver, según han indicado algunas fuentes.

Después de haber trabajado en la Casa Blanca, Deaver recibió un contrato de 105.000 dólares (algo más de 15 millones de pesetas) del Gobierno canadiense cuando comenzó a trabajar en el sector privado.

Prohibición a ex funcionarios

Las leyes federales norteamericanas prohíben que un ex funcionario gubernamental dirija negociaciones sobre cuestiones en las que "participó total y personalmente" durante el ejercicio de su cargo.Al inscribirse como representante de Gobiernos extranjeros ante el Departamento de Justicia, Deaver informó de que se reunió el pasado mes de octubre con Drew Lewis, el enviado especial sobre el problema de la lluvia ácida.

El asunto principal de la reunión celebrada apenas dos meses depués de que Deaver abandonase su cargo en la Casa Blanca fue la lluvia ácida, dijo a The New York Times una fuente anónima.

Deaver ha rechazado las acusaciones de que aprovechó su cargo en la Casa Blanca para establecer contactos o promover los contratos tle los que posteriormente se lucró, al pasarse al sector privado.

Deaver ha solicitado al Departamento de Justicia el nombramiento de un fiscal especial que investigue las acusaciones. Esa petición es independiente de otras similares hechas por cinco senadores demócratas y por la Oficina de Ética Gubernamental, ninguna de las cuales ha recibido hasta ahora respuesta del Departamento de Justicia.