Diferencias en la CE sobre la política de transporte

El ministro de Transportes, Turismo y Comunicaciones, Abel Caballero, afirmó ayer que España está a favor de una liberalización gradual del transporte en la Comunidad Europea antes de la entrada en vigor de la política común de transportes prevista para 1992. La reunión de los titulares de Transportes de los países comunitarios, prevista para hoy, ha sido aplazada hasta el próximo 17 de junio ante la solicitud de Grecia.

La elaboración de los reglamentos que desarrollen los acuerdos conseguidos en diciembre pasado en la cumbre europea de Luxemburgo se encuentra con las posturas divergentes entre los doce. Sobre el transporte terrestre de mercancías, España plantea el establecimiento de contingentes, que deberán ser incrementados progresivamente cada año, para permitir un desarrollo de este sector y una mejor competencia dentro de seis años. La posición española, apoyada por Bélgica, Italia y la RFA, se enfrenta a quienes, como Holanda, defienden el establecimiento de cuotas inmediatamente. También el paso máximo por eje motor es motivo de discrepancia, y el ministro de Transportes ha declarado que no cederá en el límite de 11,5 toneladas por eje. En nuestro país está permitido un peso máximo de 13 toneladas por eje, mientras otros Estados comunitarios tienen una reglamentación de 10 toneladas por eje motor y abogan ya por un máximo de 11.

En cuanto al transporte marítimo, el libre acceso al tráfico transoceánico y las medidas contra las tarifas desleales son los dos ejes del debate. Algunos países, entre ellos España, defienden el establecimiento de las preferencias intracomunitarias para los buques de los países miembros frente a terceros, mientras la Comisión Europea propugna el liberalismo total. Asimismo, el Gobierno exige que las sanciones contra un tercer país por competencia a bajo precio sean puestas en práctica colectivamente por los países de la CE.

En la liberalización de capacidades de flota y tarifas aéreas España pide un ritmo lento, frente a las posiciones maximalistas de Holanda y el Reino Unido. Abel Caballero señaló que en nuestro país ya está liberalizado el 75% del tráfico aéreo, realizado en vuelos charter, y por ello es necesario ir con cuidado sobre el futuro de nuestras compañías de vuelos regulares.