La saturación del hospital Xeral agrava la situación sanitaria de Lugo

El hospital Xeral do Insalud, de Lugo, el centro sanitario más importante de la provincia, se encuentra colapsado desde el pasado fin de semana y con escasas posibilidades de recibir nuevos enfermos, lo que ha obligado al director a solicitar la colaboración de los jefes de servicio para "evitar al máximo los ingresos en los próximos días". Simultáneamente se ha sabido que quedaron suspendidos los ingresos en la unidad de cuidados intensivos (UCI), presumiblemente a causa de una sepsis, infección que afecta a este tipo de unidades.

La saturación del centro hospitalario lucense más importante, con 510 camas, y la suspensión de ingresos en la UCI agravan, de forma alarmante, la situación sanitaria en una provincia que espera, desde hace tiempo, la apertura de dos nuevos hospitales que cubrirán las zonas norte y sur, y con los que se solventará, al menos momentáneamente, el déficit de infraestructura sanitaria.En los últimos días, cualquier rincón libre en el hospital del Insalud de Lugo ha sido ocupado con camas. La carencia de habitaciones obligó también a que numerosos enfermos recibieran asistencia médica en los pasillos, por algunos de los cuales resulta difícil transitar a causa de las camas, que tienen que ser apartadas para poder trasladar carros de comida y camillas. La situación se ha hecho prácticamente insostenible y el director ha distribuido una nota interna dirigida a los jefes de servicios, en la que reconoce que "el hospital se encuentra saturado de enfermos", por lo que espera contar "con su valiosa colaboración a fin de evitar al máximo los ingresos en los próximos días".

Simultáneamente se ha distribuido otra nota interna por la que se ordena la suspensión de ingresos en la unidad de cuidados intensivos. Aunque no han trascendido los motivos que llevaron a tomar esta decisión, se cree que es debido al descubrimiento de una sepsis, puesta de manifiesto la pasada semana con el ingreso y posterior fallecimiento del presidente del Parlamento de Galicia, Antonio Rosón.

El deterioro profesional, salarial y asistencial del centro lucense ha originado que la asamblea de médicos, que califica la situación de "injusta y caótica", anuncie su propósito de "dejar de cooperar con la Administración excepto en temas estrictamente profesionales".

Entre otras irregularidades, el colectivo médico considera que en el hospital de Lugo "en ocasiones faltan sábanas y mantas. La higiene de las habitaciones no es la adecuada, se atienden enfermos en los pasillos, con los consiguientes riesgos para su salud y en condiciones humanas poco dignas, y a veces hay escasez de material básico, como esparadrapo, ropa de quirófano, cristales de laboratorio, etcétera".

La asamblea de médicos asegura que la Administración "ha desviado dinero del sector hospitalario al sector de medicina privada (ambulatorios, unidades básicas de salud), sin que hasta el momento las haya dotado de operatividad real y eficacia, consiguiendo únicamente sobrecargar aún más el sistema hospitalario".

La saturación en el hospital Xeral do Insalud de Lugo se produce en un momento en el que se espera la apertura de dos nuevos centros en Burela y Monforte de Lemos, cuya puesta en fancionamiento -que según anunció la pasada semana el ministro de Sanidad, Ernest Lluch, se producirá el próximo mes- aliviará la carencia de infraestructura sanitaria en el norte y sur de la provincia, respectivamente.

Las camas en los pasillos del hospital lucense han sido una constante en la vida del centro, aunque la situación se ha intensificado de forina notable en los últimos tiempos.