Un segundo agente del FBI, implicado en un caso de espionaje
Svetlana Ogorodnikov, emigrada rusa que el año pasado confesó ser espía soviética y haber sido amante del experto en con traespionaje del FBI Richard Miller, aseguró el pasado miércoles ante el tribunal que juzga a Miller que otro miembro de la policía federal de EE UU la llevó al médico para que abortara.Tanto Ogoroclnikov como Miller han reconocido haber estado unidos sentimentalmente, y durante su primer testimonio, el pasado martes, la exiliada soviética afirmó que también había mantenido relaciones sexuales con un segundo agente del FBI, John Hunt. Ogorodnikov aseguró que Hunt la acompañó al médico, pero se negó a identificar al padre del bebé.
Asimismo, la espía afirmó que Hurit temió durante algún tiempo ser asesinado por agentes de la Agencia Central de Inteligencia (CIA). Ogorodnikov y su esposo, Nikoiai, interrumpieron el año pasado el juicio al que estaban siendo sorrietidos al declararse culpables de pasar información a una potencia extranjera.
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