El pago de la deuda debe ajustarse a la riqueza de cada país, según De la Madrid

El presidente de México, Miguel de la Madrid, ha manifestado que "el pago de la deuda externa debe ajustarse a la capacidad económica de cada país", al tiempo que advirtió "sobre las implicaciones políticas y sociales al verse frustradas las aspiraciones populares legítimas" como consecuencia de la crisis económica provocada por la deuda externa de América latina.

En su discurso de inauguración del 21 período de sesiones de ministros de la Comisión Europea para América Latina (CEPAL), pronunciado el miércoles en la capital mexicana, De la Madrid afirmó la corresponsabilidad de los países en desarrollo y desarrollados en la crisis de la deuda externa e insistió en su ideal del "ajuste del servicio de la deuda a la capacidad real de pago de nuestros países".El presidente mexicano aprovechó el foro que le ofrecía la reunión de ministros de la CEPAL en la 21ª asamblea, que se celebra en México, para hacer un análisis amplio de la crisis económica que afecta a la región. Para De la Madrid, "el endeudamiento se encuentra claramente originado por decisiones conjuntas y, en consecuencia, corresponsables de países en desarrollo y desarrollados. (...) Los unos querían y necesitaban crecer y los otros se encontraban con grandes montos de liquidez, que no podían absorber y deseaban reciclar".

De la Madrid propuso una "solución duradera" para la crisis, basada en cuatro puntos:

Solución duradera

1. Ajuste del servicio de la deuda a la capacidad real de pago de los países de América Latina. Capacidad que debe implicar una tasa adecuada de crecimiento.2. Mecanismos eficientes de financiación y reducción de su costo.

3. Apertura de mercados que permitan a América Latina exportar para mejorar la capacidad de crecimiento y pago.

4. Ambiente internacional propicio para el logro de soluciones operativas, con vistas a la cooperación en las diferentes áreas de la economía internacional.

Llamó la atención el presidente mexicano sobre la importancia del deterioro de los términos de intercambio entre los países desarrollados y América Latina. "En relación con 1970 el conjunto de la región necesita vender cerca de una cuarta parte más para obtener lo mismo".

En su discurso ante los representantes de 40 países, De la Madrid expuso que América Latina, "para fines de 1985, necesitó más de un tercio de sus exportaciones para pagar los intereses de la deuda, frente al 15% en 1980". Se refirió también a que entre 1983 y 1985 la región transfirió al exterior "más de 105.000 millones de dólares a través del pago de intereses y remisión de utilidades, y solamente obtuvo 18.000 millones en préstamos e inversiones".