Craxi amenaza a Gaddafi con represalias militares en caso de una nueva agresión contra Italia
El presidente del Gobierno italiano, Bettino Craxi, lanzó ayer una seria advertencia al dirigente Muammar el Gaddafi al asegurar que su país no a conformarse con "simples protestas verbales" en el caso de que sufra una nueva agresión libia similar a la registrada la semana pasada contra la isla de Lampedusa. El jefe del Ejecutivo italiano criticó, además, la pretensión de Estados Unidos de combatir el terrorismo con fuerzas militares clásicas y rechazó la acusación de que Europa no ha hecho todo lo debido y necesario para contener esa "guerra, que es nueva y diferente".
Craxi lanzó en la. mañana de ayer una sonoro llamada par un "alto el fuego general en el conflicto del Mediterráneo. Había convocado una conferencia de prensa internacional y se dirigió a los periodistas incluso antes de hablar ante el Parlarnento. De ahí, el gran interés que había suscitado. Los corresponsales llenaron de bote en bote la sala de las Repúblicas Marineras del palacio Chiggi, sede de la presidencia italiana.El presidente socialista, que no suele brillar durante las conferencias de prensa, fue ayer, sin embargo, muy explícito. Puso en guardia a todos, Estados Unidos, Reino Unido, Libia y Unión Soviética, acerca de la gravedad de una nueva escalada militar como eventual represalia por la nueva ola de terrorismo que se ha desencadenado tras el ataque norteamericano, en Libia.
Al mismo tiempo advirtió que un recrudecimiento del terrorismo "no podría quedar sin respuesta".
Explicó que el terrorismo representa "una guerra nueva y diferente", la cual, por tanto, "no puede ser combatida con los medios tradicionales de las guerras clásicas". Las nuevas acciones terroristas, dijo Craxi, demuestran que "no existe una sola central del terrorismo" y que, en consecuencia, de nada serviría atacar a la central considerada más sospechosa.
Según el presidente italiano, la situación que se ha desencadenado es "compleja y grave" y resulta difícil saber a dónde podría conducir si se continúa "con la lógica militar". Por eso, insistió Craxi tanto durante su declaración prelirninar como en las respuestas a las numerosas preguntas que le formularon los periodistas, es urgente "un esfuerzo internacional en favor de la paz", así como la búusqueda de soluciones "políticas y diplomáticas, y no militares, frentea la amenaza del terrorismo'.
Rechazó la acusación hecha por Estados Unidos de que Europa ha sido demasiado blanda con el terrorismo. Craxi explicó con un cierto orgullo que Italia ha sabido vencer "sin las armas" un terrorismo duro y difícil como el de las Brigadas Rojas. "Hay que saber poner fin a las amenazas, a las intrigas y a los complós", dijo Con fuerza el presidente italiano y afirmó que a Estados Unidos le resulta fácil hablar de terrorismo porque lo tiene lejos, mientras que Europa lo tiene en casa.
Dirigiéndose al Gobierno de Trípoli, afirmó Craxi que, míentras Italia nunca ha llevado a cabo acciones de guerra contra Libia, "el general Gaddafi, por el contrario, ha lanzado misiles contra la isla italiana de Lampedusa que sólo por milagro no causaron daños". "Éste ha sido el primer acto de agresión militar contra Italia desde la última guerra mundial", afirmó Craxi. Italia, prosiguió, no ha reaccionado militarmente porque "tiene una vocación de paz" y para evitar males mayores. Pero a partir de ahora, subrayó, Libia debe estar atenta porque, ante una segunda agresión de este tipo, "Italia no podría conformarse con una simple protesta verbal".
En el fondo, el mensaje que Craxi envió a Gaddafi puede traducirse del modo siguiente: No sigáis creándonos problemas, en un momento en el que Italia está pidiendo con fuerza que se vuelva al diálogo y que se acaben las hostilidades.
Insistió también Craxi en que los problemas de Oriente Próximo no se resolverán a fondo mientras no se eliminen las causas y las raíces del conflicto, como lo es, por ejemplo, el problema palestino.
A la Unión Soviética Craxi le dijo ayer que espera que ponga toda la influencia de la que goza en los países árabes "para darles buenos consejos" y añadió que no se debe olvidar que, ante las víctimas inocentes del terrorismo relacionado con el Oriete Próximo, Occidente no puede quedarse con los brazos cruzados. Pero a Estados Unidos le ha recordado también la responsabilidad que tiene de "no romper el hilo del diálogo con la Unión Soviética" precisamente en un momento de tanta tensión.
A quienes acu:san en este momento a Italia de no haber reaccionado militarmente frente a la agresión libia Craxi les respondió diciendo: "Queremos que un día la historia pueda decir de nosotros que hemos, obrado con la conciencia limpia, ayudando al mundo a razonar y a desplazar el conflicto del campo de las armas al del diálogo". Y añadió: "Son los pueblos fuertes, las grandes potencias democráticas, las que tienen mayor obligación de defender la justicia en vez de usar la fuerza, que suele engendrar siempre mayor violencia".
Craxi acabó citando al papa Woityla, que ha pedido que el conflicto del Mediterráneo se resuelva "con sabiduría" y también "mediante el encuentro pacífico entre los pueblos". Y afirmó: "Éste es y será el camino por el que quiere moverse Italia".
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