El ocio gratuito en Madrid

La disponibilidad de dinero no es condición indispensable para disfrutar del ocio en Madrid. Todos los días se celebran en la villa y corte docenas de actos de entrada gratuita, desde proyecciones cinematográficas a conciertos de música, pasando por cursos de esperanto o campeonatos de billar. Universidades, bibliotecas, entidades financieras, juntas municipales y asociaciones de todo tipo son las entidades promotoras de este ocio gratuito.

Ver la película Furtivos, de Borau, o las fotografías de Catalá Roca; asistir a la representación teatral de una pieza de Peter Handke, o escuchar la disertación de Miguel Artola sobre Aspectos militares de la guerra civil o un concierto del Quinteto Español con obras de Bralinis o Dvorak son algunas de las convocatorias a las que esta semana pueden asistir los madrileños sin preocuparse de llevar un duro en el bolsillo.Entidades como el Ateneo, el Círculo de Bellas Artes, las fundaciones March y Santillana, la Caja de Madrid, el Banco Exterior, La Caixa, la Caja Postal, el Club de Amigos de la Unesco y los centros culturales Mantuano y Alberto Sánchez son algunos de los más frecuentes convocantes de ocio gratuito en Madrid.

Mención aparte merecen las universidades madrileñas, que cuentan con un amplio programa de actividades de extensión cultural a lo largo de todo el curso. La Complutense, por ejemplo, organiza regularmente proyecciones cinematográficas, montajes teatrales, exposiciones y conciertos a los que se puede asistir de modo gratuito. Ahora mismo, en la escuela de Estomatología se está celebrando un ciclo de cine de Abbot y Costelo, y en la facultad de Ciencias de la Información, otro sobre arte contemporáneo; en Bellas Artes actúa mañana el Cuarteto de Cámara Madera 1, y en Filosofía hoy actúan el Burgtheater de Viena y, el miércoles, el colectivo teatral Guirigai.

La Autónoma, por su parte, tiene esta semana en marcha un programa de actos sobre la guerra civil en el que pronuncian conferencias Miguel Artola, Luis Garrido y Pierre Vilar, y se proyectan las películas Soldados, de Ungría, y Sierra dé Teruel, de Malraux. Por lo que a la Politécnica respecta, durante todo el año organiza proyecciones cinematográficas para ilustrar temas de debate.

Los colegios mayores son también en muchas ocasiones centros culturales y de ocio gratuitos. La proyección de Alegres compañeros, con la que cierra el colegio mayor Charninade esta semana un largo ciclo sobre cine soviético, o el Primer Certamen Nacional de Videoclips, que se celebrará dentro de unos días en el colegio mayor África, son dos convocatorias a las que se puede acceder sin pagar dinero.

Bancos y juntas municipales

Desde hace algunos años, los bancos y cajas de ahorro dedican también su atención a cubrir la creciente demanda de ocio y cultura, como atestiguan la sala de conciertos que la Caja Postal mantiene abierta o las exposiciones que montan la Caja de Madrid, La Caixa o el Banco de Bilbao.Convocatorias por lo general más modestas, pero también mucho más numerosas, son las que ofrecen las distintas juntas municipales. La mayor parte de los distritos madrileños organiza en sus centros culturales ciclos cinematográficos, exposiciones, conferencias y recitales de música. Por citar un solo ejemplo, en Vallecas se puede ver en los próximos días la exposición de fotografías de Catalá Roca o las películas Calabuch, Furtivos y Las largas vacaciones del 36.

Leer la prensa tampoco ha de ser necesariamente actividad onerosa para los madrileños. Las hemerotecas nacional y municipal, así como muchas bibliotecas, disponen de salas de acceso gratuito donde se pueden leer periódicos y revistas de actualidad.

La red de bibliotecas populares, por cierto, organiza con mucha frecuencia ciclos cinematográficos en su sede central de Felipe el Hermoso. Ni que decir tiene que la entrada no cuesta un duro.

Los espectáculos deportivos no son tan accesibles cuando no se dispone de dinero. Solamente las competiciones de algunas modalidades minoritarias (esgrima, billar, tiro con arco) y aquellas que se celebran en espacios abiertos donde no se pueda cobrar entrada (caso del ciclismo) quedan al alcance de quien ande en precaria situación económica.

En ese contexto, son de agradecer iniciativas como las de la Asociación de Profesionales del Golf, que en la última edición de su torneo, disputada hace tres semanas en el Club de Campo, no cobró entrada alguna, pese a participar en él cinco campeones del mundo.

Comprar o mirar

Mientras que para comprar obras de arte hay que ser titular de saneadas cuentas corrientes, visitar las exposiciones donde esas obras se muestran es actividad completamente gratuita. Max Ernst, Miquel Barceló, los escultores británicos contemporáneos y José María Sert son algunos de los artistas que ahora mismo quedan al alcance visual de los bolsillos más depauperados.Para visitar a la Dama de Elche o a La maja desnuda sólo se precisa acudir al Museo Arqueológico y al Museo del Prado, respectivamente, con el documento nacional de identidad, que también le abre a uno las puertas de los museos de Arte Contemporáneo, Sofolla, Lázaro Galdiano, Romántico, Municipal y Ferroviario.