De hospitales
Salvo algunas imprecisiones y errores técnicos, felicito al señor Ignacio Carrión por su artículo del pasado domingo, día 16, Fábricas de dolor.A muchos profesionales de la sanidad española nos hubiera gustado que especificara nombres de los hospitales y lugares donde se enclavan, y no una descripción sin datos concretos.
Lo penoso de nuestros hospitales andaluces no es el estado en que se encuentran, sino la falta de voluntad política por parte de la Junta de Andalucía para poner fin a tanto desmadre.
El pasado día 28 de enero denuncié, mediante carta publicada en el diario Sur de Málaga, las pésimas condiciones en que se encuentra el hospital regional Carlos Haya, donde ejerzo como ATS. Entre otras irregularidades, denunciaba que en varias plantas del hospital el material estéril y de un solo uso se encuentra almacenado en el cuarto de la basura y ropa sucia contaminada, y a veces en contacto con ella. Pues bien, hasta la fecha esta anomalía, así como otras, no han sido subsanadas. Nadie ha investigado ni una sola de mis denuncias. Todo da igual.
Continuamos con el mismo director de Enfermería, a pesar de haber sido pedida públicamente su destitución por el comité de empresa -y por el personal auxiliar sanitario de este hospital. No importa que su labor sea torpe e inútil, con tal de que sea fiel al principio de ahorro, aun a costa de la calidad de asistencia. Despues de tanta inoperancia hasta tienen la ironía de hacer propaganda con el siguiente lema: "Reforma sanitaria. en Andalucía. Te la debíamos".
¡Ah, se le olvidaba citar al señor Carrión que, a pesar de todos los carteles de prohibido fumar, lo primero que se encuentra el visitante de nuestro hospital general Carlos Haya es una máquina automática expendedora de tabaco (servicio de 24 horas).-. ATS del hospital general Carlos Haya. .
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