Miembros de la Crida abuchean al presidente del Gobierno

El presidente del Gobierno, Felipe González, llegó ayer por la tarde a Barcelona para asistir a una cena-coloquio sobre la OTAN organizada por la Asociación de la Prensa. Unas 400 personas, divididas en dos grupos de similares dimensiones, esperaban al presidente del Gobierno en las inmediaciones del hotel en el que se desarrolló el acto. Simpatizantes de la organización nacionalista radial Crida a la Solidaritat y algunas personas pertenecientes a la Coordinadora por la Paz abuchearon a Felipe González, mientras proferían gritos contra la OTAN y pedían la libertad de dos presuntos rniembros de la organización terrorista Terra Lliure detenidos.Frente a ellos, un grupo de militantes socialistas aplaudió la llegada de Felipe González y coreó la consigna Visca Catalunya socialista, y Crida no, llibertat d´expresió (Crida no, libertad de expresión), a lo que los miembros de la Crida respondían: Que os paga la CIA. Los gritos se habían producido también con anterioridad, al hacer acto de presencia el primer secretario del PSC, Raimon Obiols.

Cuando el presidente del Gobierno estaba ya en el interior del hotel, el coche oficial fue apedreado. Posteriormente, el grupo de la Crida cortó el tráfico, y fue dispersado por la policía, que detúvo a un joven. Momentos antes de la llegada de la comitiva, una manifestación antiatlantista formada por estudiantes de diversos institutos había cortado también el tráfico en las cercanías del hotel.

Felipe González cerró con su intervención un ciclo de: conferencias-coloquio sobre la Adianza Atlántica organizado por aquella entidad, pero con un año de retraso. La participación de Felipe González estaba prevista hace 12 meses, pero fue anulada porque el presidente viajó a Moscú para asistir a las honras fúnebres del máximo dirigente soviético Konstantín Chernenko.

En el ciclo intervinieron con anterioridad Gerardo Iglesias, secretarlo general del PCE, Manuel Fraga, presidente de AP, y Miquel Roca, portavoz de Minoría Catalana y dirigente de Convergència Democrática.

La Asociación de la Prensa invitó a dirigentes políticos y sindicales catalanes a que asistieran al coloquio de anoche. Al menos dos, Antoni Gutiérrez Díaz, del PSUC, y Heribert Barrera, de ERC, rechazaron la invitación. Gutiérrez Díaz escribió una carta al presidente de la entidad, Carlesi Sentis, en la que califica de "inoportuna" esta cena-coloquio por realizarse en plena campaña electoral. Un portavoz del movimiento pacifista aseguró que no habían sido invitados.

Pese a la existencia de tres filtros de la organización que comprobaban las invitaciones con las que asistían a la cena-coloquio, periodistas y personalidades políticas especialmente invitadas, al acabar la intervención del presidente del Gobierno, tomó la palabra un joven, Josep Maria Llansà, que habló en nombre de la Crida a la Sialidaritat. Dos miembros de la escolta presidencial retuvieron al joven en un despacho del hotel donde se celebraba el coloquio. Fueron tres los mierabros de la Crida que lograron entrar utilizando falsa personalidad de periodista.