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La economía crecio un 1,7% en 1985, según el balance del Banco de España

La economía española creció el pasado año un 1,7%, según el balance del Banco de España. Este crecimiento -medio punto por debajo del 2,2% de 1984- es, sin embargo, superior a las previsiones realizadas en el pasado mes de octubre. Entonces, el cálculo situaba el aumento del producto interior bruto (PIB) en un 1,5%.

La corrección al alza es consecuencia de la reactivación de la demanda en el último trimestre del año, donde los componentes básicos de consumo, inversión y sector exterior experimentaron una notable mejoría.El año 1985 tiene dos partes diferenciadas. El primer semestre muestra un estancamiento, o incluso un declive de nuestra economía, que hizo pensar en una depresión dentro del proceso de ajuste. El segundo semestre, sobre todo en los últimos meses del ejercicio, muestra una recuperación y atisbos de cierta reactivación. El plan económico a medio plazo presentado por el Gobierno ofrece para el cuatrienio iniciado en enero un crecimiento medio del 3%, lo que nos sitúa en cifras porcentuales levemente superiores a la media del resto de los países de la Comunidad Europea (CE). La previsión es que el PIB crecerá este año un 2,5%.

El dato más relevante del pasado ejercicio es el crecimiento positivo del consumo interior. Mientras en 1984 éste había sido negativo (-0,8%), en 1985 creció un punto, Esta variación significativa viene a compensar el relativo estancamiento del sector exterior. En 1984 se produjo el boom de las exportaciones españolas, amparadas en parte por la fuerte depreciación de la peseta frente al dólar. Entonces, el sector exterior contribuyó con tres puntos al crecimiento de la economía y permitió una mayor aportación de riqueza interna.

El sector primario, fundamentalmente la agricultura, aumentó un 1,7%, que supone una mejora moderada sobre un espectacular incremento de 10 puntos en 1984. La industria reflejó un 1,9% , similar a los dos puntos de 1984; y la construcción, a pesar de su aportación nula a la economía, consiguió frenar el descenso de los últimos años (-3,5% en 1984).

Otro dato significativo es el de la formación bruta de capital, que pasó de -3,2% en 1984 a un aumento de cinco puntos en el ejercicio recién terminado. Destaca sobre todo la inversión en bienes de equipo, que se eleva al 12%, frente a un descenso del 1% en 1984.

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