El ministro de Industria recibe hoy a los presidentes de las electricas para hablar de tarifas y saneamiento del sector

El ministro de Industria y Energía, Joan Majó, se reúne hoy con los presidentes de las empresas eléctricas con el aparente fin de informarles sobre los próximos pasos que la Administración tiene previsto dar para cumplir los compromisos adquiridos con el sector como compensación a los intercambios de activos cerrados ya por las empresas. Ma ó tiene intención, al parecer, de informar a los presidentes sobre los aumentos de tarifas para 1986 y sobre la petición para que se acompase la política de amortizaciones.La entrevista, que se ha visto retrasada en una semana sobre la fecha originalmente prevista, será el primer encuentro que ambas partes celebran desde que el ministro de Industria tuvo que intervenir, en funciones de árbitro, para dirimir las diferencias que separaban a las empresas privadas con la pública Endesa sobre los precios del suministro de la energía que ésta cede a las primeras a cambio de la renuncia de la pública a participar en el negocio de la distribución. La mediación ministerial, que se produjo a finales del pasado mes de diciembre, permitió desbloquear el acuerdo sobre intercambio de activos, firmado por las empresas el último día de 1985.

El Ministerio de Industria y Energía ha cerrado en los últimos días, de forma definitiva, el capítulo de las compensaciones eléctricas correspondientes a 1985, es decir, las cantidades que las empresas están obligadas a abonarse unas a otras en concepto de intercambio de energía. Su concreción era fundamental para poder cerrar, a su vez, el ejercicio pasado y permitir que las empresas fijaran su política de dividendos.

Temas previstos

Los temas previstos en la entrevista entre Majó y los presidentes guardan relación con los planteamientos que el sector hizo al Gobierno en la carta que el presidente de Unidad Eléctrica (Unesa), Juan Alegre Marcet, envió al ministerio en los últimos días del mes de octubre. En la comunicación, que sirvió de preacuerdo para los intercambios de activos, el sector recordaba al Gobierno los compromisos adquiridos por ambas partes cuando firmaron el denominado protocolo para la reordenación del sector, en mayo de 1983.Al parecer, el ministro de Industria y Energía, o algún representante núnisterial (el interlocutor puede no ser el ministro, en última instancia), entregará a los presidentes por escrito una declaración con los futuros compromisos gubemamentales. En esta declaración se incluirán las intenciones administrativas en relación a los aumentos de tarifas, así como la futura política en relación a la política de amortizaciones y sobre dividendos.

El sector eléctrico, a petición del ministerio de Industria, entregó el pasado mes de diciembre un doble escenario sobre aumentos de tarifas, teniendo en cuenta el cumplimiento de las normas de saneamiento dictadas por la Administración. Juan Alegre Marcet, presidente de Unesa, manifestó hace unos días que la petición de aumento de tarifas se situaba en dos puntos por encima de la inflación prevista, aunque los cálculos teóricos eran superiores a este porcentaje

La petición de un aumento de tarifas en tomo a dos puntos por encima de la inflación prevista -punto éste que ha sido criticado ayer por algunas organizaciones de los consumidores- estaba también contenida en el documento remitido al ministerio y formaba parte de la estrategia conjunta del sector para los próximos años.

Los puntos pendientes de negociación que han sido planteados por el sector son los siguientes: aumento adecuado de tarifas; adopción de un régimen fiscal que permita el mantenimiento legal de las bonificaciones a las inversiones; concreción del alcance de la moratoria nuclear o, en su caso, recuperación de inversiones; definición anual anticipada de las compensaciones y, en el tema de sanearriíento financiero, tratamiento adecuado y periodificación de las cargas de capital, ampliación de los plazos de amortización a la vida útil, mayor margen de activación y periodificación de la deuda extranjera al tipo de cambio en el momento de la disposición.