El aumento de las importaciones elevó a casi un billón de pesetas el déficit del comercio exterior

Los resultados de comercio exterior de la economía española durante 1985, según los datos de la Dirección General de Aduanas, reflejan un cierto relanzamiento de la demanda interna como consecuencia de los incrementos de compra de productos siderúrgicos, vehículos y maquinaria y aparatos mecánicos, al tiempo que se han conseguido aumentos importantes de las ventas de productos españoles, que en términos reales crecieron un 4,07%, más de lo previsto por la Administración. A pesar del mayor valor de las compras al exterior, la tasa de cobertura (porcentaje de las importaciones cubierto por las exportaciones) subió ligeramente durante 1985.

El valor de las importaciones españolas durante 1985 superó los cinco billones de pesetas, con un crecimiento del 9,6% en términos nominales, mientras que las exportaciones alcanzaron la cantidad de 4,1 billones de pesetas, con un aumento nominal del 10%. El déficit de la balanza comercial se situó en 969.000 millones de pesetas, superior en 70.000 millones de pesetas al del año anterior, aunque esto último no ha impedido que la tasa de cobertura del comercio exterior se acercara al 81%.Los resultados de comercio exterior del último mes del año muestran un fuerte crecimiento de las exportaciones y las importaciones españolas, con tasas superiores al 32% en ambos casos, más en la compra de productos, que se explica, según los expertos, en movimientos de anticipación a las posibles consecuencias de la entrada de España en la Comunidad Europea (CE).

El fuerte aumento de las exportaciones en diciembre puede deberse a la desaparición de la desgravación fiscal a la exportación, aunque se mantiene para los productos almacenados y declarados antes de que acabara el pasado año. El valor de las exportaciones durante el último mes del pasado año fue de 460.000 millones de pesetas, con un incremento del 32%.

El aumento de las importaciones podría tener alguna relación con los movimientos especulativos sobre la peseta, ya que algunos importadores consideraban como casi seguro que al entrar en la CE se produciría una devaluación de la peseta. No obstante, este último movimiento no parece detectarse de forma real, ya que las cifras de pagos realizados según el registro de caja del Banco de España son bastante inferiores a las recogidas por Aduanas, cuando, de haber movimientos especulativos, tendría que ocurrir lo contrario. Las importaciones en diciembre crecieron por encima del 39%, hasta situarse en 555.000 millones de pesetas. El crecimiento en términos reales de las importaciones españolas se ha situado en torno al 7,54% mientras que el de las exportaciones ha crecido un 4,07%, casi lo mismo que el 4% previsto por la Administración.

Saldo positivo

Los fuertes crecimientos de compras de los productos básicos para la industria -siderúrgicos, maquinaria y vehículos- reflejan necesariamente un cierto relanzamiento de la demanda interna, que también se observa en el hecho de que la inversión privada creció un 5% durante 1985, según las estimaciones de la propia patronal CEOE.Las relaciones comerciales de España con los principales países industrializados, los miembros de la OCDE y del Comecon presentan saldos positivos para España, mientras que los intercambios con las naciones americanas, excluidas Estados Unidos y Canadá, presentan déficit importantes, lo mismo que con los países exportadores de petróleo.

Esta distribución geográfica de las exportaciones españolas puede permitir que a lo largo de 1986 se vuelva a producir un crecimiento de las ventas al exterior en términos reales superior al 4%. Estos cálculos se establecen en función de que, al disminuir la factura petrolífera en las naciones industrializadas, se produzca un fuerte crecimiento de las compras de otros productos de los que España puede presentar ofertas competitivas.Junto al importante salto dado en el último año en los datos de comercio exterior, las relaciones económicas con el resto de países muestra mejoras sustanciales, según los datos del registro de caja. Los ingresos brutos por turismo superaron por primera vez los 8.000 millones de dólares. Las inversiones extranjeras en España sumaron más de 3.000 millones de dólares, también por primera vez, y el saldo neto de estas inversiones se situó por encima de los 2.500 millones de dólares.