La banca oficial saldrá al mercado para compensar los menores, recursos procedentes del coeficiente obligatorio

El Instituto de Crédito Oficial (ICO) y las entidades dependientes (Banco Hipotecario, Industrial, Agrícola y Local) durante 1986 tendrán que obtener fondos del mercado en mayor proporción de lo que lo han hecho en ejercicios anteriores para financiar sus inversiones, ya que durante este año los recursos proceden tes de la suscripción obligatoria de cédulas para inversión por parte de bancos y cajas de ahorro volverá a disminuir. En 1985, el crédito oficial tuvo que solicitar un anticipo mayor de lo previsto del Banco de España para compensar la disminución en 25.000 millones de pesetas de cédulas para inversión, dada la baja de pasivos computables de la banca.

La financiación de la banca oficial se ha venido obteniendo de forma tradicional mediante la apelación a las dotaciones del Tesoro, la colocación de cédulas para inversión o cédulas agrarias entre las instituciones financieras dentro de los coeficientes obligatorios de bancos y cajas y la obtención de recursos directamente del mercado, interior o exterior.La decisión política de disminuir las dotaciones del Tesoro, como una de las fórmulas utilizadas para impedir el crecimiento del déficit público, y la reforma a la baja de los coeficientes que obligatoriamente tienen que cubrir bancos y cajas exigen. que en las condiciones actuales el ICO y los bancos públicos que de él dependen deban salir al mercado, en competencia con el resto de instituciones privadas, para obtener el ahorro privado que necesitan para firíanciar sus actividades crediticias. La disminución de los recursos por suscripción de cédulas para inversión, calculada en más del 50% de lo previsto, exigirá fuertes salidas al mercado interior de ahorro.

Las previsiones iniciales de los responsables del ICO sobre nuevas cédulas para inversión obligatoria durante 1986 se cifraban en 150.000 millones de pesetas. No obstante, la reforma a la baja de los coeficientes de inversión y la disminución de los pasivos computables en bancos Y cajas como consecuencia del efecto de sustitución de depósitos en instituciones financieras por pagarés del Tesoro, hacen que estas previsiones hayan quedado como inalcanzables y que en estos momentos se considere como una. cifra posible entre 60.000 y 70.000 millones de pesetas, la mitad de lo previsto inicialmente. Estas cantidades, en cualquier, caso, están pendientes de que se confirme o no la tendencia durante este año a la sustitución de pasivo de bancos y cajas por pagarés del Tesoro.

La decisión de no proceder a solicitar anticipos del Banco de España, como apelación al Tesoro, exige que la diferencia entre los fondos necesarios y los obtenidos mediante las cédulas se cubra mediante tres mecanismos distintos: reducir la actividad crediticia dela banca oficial -con lo que se necesitarían menos fondos-, gestionar de manera uniforme la tesorería de todas las entidades de crédito o aumentar la salida, en competencia, a los mercados de capitales.

Las alternativas elegidas para este año se centran en un intercambio de tesorería y en aumentar la salida a los mercados, aplazando al menos algunos meses la reducción de la actividad de la banca oficial hasta que se consolide la recuperación de la economía española. Los bancos oficiales tienen situaciones distintas de tesorería, el Banco de Crédito Local y el Agrícola cuentan con excedentes importantes, mientras que el Industrial necesita fondos. La gestión unitaria de tesorería propiciará el traspase de los excedentes de unos bancos a otros, con los costes correspondientes, lo que permitirá obtener entre 20.000 y 30.000 millones de pesetas.

Baja de tipos

El resto de los fondos necesarios se obtendrá por una mayor salida del ICO a los mercados de capitales, centrándose más en ahorradores instítucionales, ya que parece estabilizado el nivel de fondos procedentes de los ahorradores privados, y las primeras experiencias del Banco de Crédito Industrial en operaciones de emisión de certificados de depósitos, bonos o pagarés del banco. El Banco Hipotecario tendrá que forzar algo el volumen de emisiones de cédulas hipotecarias y el Banco de Crédito Agrícola y el Local reforzarán su política de captar pasivo de cajas rurales y Ayuntamientos, respectivamente. La necesidad de obtener fondos del mercado, más caros que los de los coeficientes obligatorios, se compensa con la reciente liberalización de las operaciones de activo de la banca oficial.