Los Reyes presiden en Toledo la inauguración de un edificio histórico restaurado
Don Juan Carlos y doña Sofía, invitados por el Gobierno regional de Castilla-La Mancha, presidieron ayer en Toledo el acto de inauguración de un edificio histórico, conocido popularmente como del Nuncio, restaurado por el Ejecutivo autónomo. Se trata de un edificio construido en el siglo XVIII dedicado a centro hospitalario y de beneficencia.Sus majestades los Reyes llegaban alrededor de las 13.00 horas al helipuerto de la fábrica de armas, donde les esperaban el presidente de la comunidad, José Bono, y el delegado del, Gobierno en la región, Pedro Valdecantos.
Seguidamente los Reyes se dirigieron al edificio restaurado donde les esperaban unos 400 invitados. Tras oir el himno nacional, interpretado por la banda de música de la academia de infantería de Toledo, los Reyes recorrieron las dependencias del remodelado edificio, en el que se van a instalar los servicios centrales de las Consejerías de Política Territorial y de Economía y Hacienda.
Don Juan Carlos, en unas palabras improvisadas -aunque estaba previsto que pronunciara un discurso- agradeció los elogios que previamente, había dirigido José Bono a la corona de España. El presidente de Castilla-La Mancha, tras descubrirse una lápida que recuerda la visita regia, se refirió al papel del Rey "bajo cuyo mandato", dijo, "España ha perdido el miedo a la transición democrática".
Asimismo, el Rey se mostró satisfecho por la concesión de la primera medalla de oro de la región, una condecoración otorgada por el Gobierno de Castilla-La Mancha, que aseguró que llevará "con agrado y honor".
Los Reyes de España almorzaron un menú manchego con los miembros del consejo de Gobierno en el Palacio de Fuensalida, sede del ejecutivo regional.
