Abu Nidal, el extremista más buscado

Abu Nidal, un palestíno nacido hace 42 años en el puerto de Jaffa contiguo a Tel Aviv, es hoy uno de los extremistas más buscados en todo el mundo. Sabri el Banna, el verdadero nombre de Abu Nidal, debió abandonar la tierra en que nació, junto a 100.000 familias tras la creación del Estado judío en 1948. Se integró después en la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), de la que llegó a ser su representante en Bagdad, la capital iraquí. En 1974 se separó de la OLP para formar el grupó Fatali Consejo Revolucionario.Se convirtió, desde entonces, en uno de los mayores adversarios del líder palestino Yasir Arafat, a quien acusó de haber traicionado la causa palestina. La OLP le condenó a muerte más tarde, por haber planeado una operación para asesinar a Arafat. Su enemistad con Arafat se incrementó tras el acuerdo que suscribió el líder palestino en El Cairo, y sus últimas acciones han estado destinadas a debilitar la credibilidad del jefe de la OLP.

Con más de un centenar de miltantes, su organización mantiene instalaciones en la ciudad libanesa de Trípoli, y su portavoz en la capital Siria suele ofrecer conferencias de prensa. Una de las características del grupo es que no posee un programa ideológico, y su único objetivo es la eliminación de todos los enemigos de la causa palestina. Los especialistas han declarado que el grupo de Abu Nidal recluta militantes con marcadas inestabilidades emocionales y los aísla durante seis meses en campos de etrenamiento militar y psicológio.

Se cree que Abu Nidal vive en Libia, pese a que el año pasado se informó que había muerto, de un ataque al corazón, en Bagdad, la capital iraquí. Hace un año, la agencia libia Jana dio cuenta de una reunión entre Abu Nidal y Muammar el Gaddafi en Trípoli.

Se le acusa de haber planeado el secuestro del Boeing 727 de la Egypt Air el mes pasado, que terminó en un sangriento rescate en Malta, en el cual murieron 60 personas. Las autoridades europeas lo buscan como responsable, además, de los asesinatos de los representantes de la OLP en- Londres, París, Bruselas, Roma y Madrid, en la década pasada.