El Papa propone la castidad y la mortificación como control de la natalidad

Juan Pablo II pronunció en la mañana del jueves dos discursos sobre la sexualidad conyugal y la manipulación biológica del embrión humano.En su alocución a los participantes en un curso para profesores especializados en métodos naturales para la regulación de nacimientos, el papa Wojtyla volvió a condenar todos los métodos artificiales de control de natalidad y propuso como solución, entre otras cosas, "la castidad y el auto control", como también la "mortificación", la "ascética cotidiana" y la "comprensión y paciencia". Acabó el Papa diciendo que la ley divina, dificil y exigente, "comporta lógicamente sufrimiento y sacri ficio", pero que al mismo tiempo conduce a la victoria, porque "ilumina, purifica, eleva y salva". En su discurso dirigido a la asamblea general del Consejo Pontificio para la Familia, un organismo creado por el papa Wojtyla hace cuatro años y al que pertenecen 20 parejas de casados de todos los continentes, Juan Pablo II afirmó que el matrimonio y las relaciones conyugales son los campos donde "el desorden interior, consecuencia del pecado original y de los pecados personales, han extendido con mayor fuerza las nieblas de la desorientación y de la duda".

El Papa añadió que la Iglesia "no enseña verdades imposibles de vivir", aunque apunta: "Cierto es, sin embargo, que las exigencias de la vida cristiana superan las posibilidades del hombre si éste no está ayudado por la gracia".

El Papa dio a entender que la curia está preparando un documento sobre la manipulación del embrión humano, en colaboración, con varios dicasterios romanos y con expertos en la materia.