Los excedentes empresariales crecieron un 33% en 1984, según el Banco de España

La rentabilidad media de las empresas españolas aumentó de forma significativa en 1984, según se desprende de los datos publicados por la central de balances del Banco de España sobre un total de 3.506 empresas, de las que 331 eran de titularidad pública y el resto privada. Los resultados totales netos de estas sociedades alcanzaron los 75.000 millones de pesetas, mientras que un año antes apenas alcanzaban los 600 millones de pesetas.

Los datos publicados por el Banco de España presentan de forma separada, por primera vez, la evolución de las sociedades no eléctricas, que reflejan una situación más real de la evolución de la economía por las distorsiones que este sector provoca al conjunto.Las empresas no eléctricas privadas obtuvieron unos resultados netos totales, después de gastos financieros y de la activación de intereses, de 161.000 millones de pesetas en 1984 -frente a 120.000 millones el año anterior-, lo que representa un crecimiento superior al 33%. Por su parte, las empresas públicas no eléctricas redujeron de forma también importante el nivel de sus pérdidas, cifradas en 177.000 millones de pesetas, mientras que un año antes superaban los 210.000 millones de pesetas.

El gobernador del Banco de España, Mariano Rubio, en su presentación del estudio de la central de balances en un acto organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección, destacó la importancia que anualmente va tomando dicho estudio por el incremento de empresas que contestan los cuestionarios, que representan ya el 26% del producto interior bruto de los sectorers considerados y el 21% de la población ocupada en ellos. Mariano Rubio destacó que la representatividad de estas empresas por la tasa de inversión es algo más alta.

Reducción de deuda

Los datos de los balances y cuentas de resultados estudiados muestran, según el gobernador del Banco de España, no sólo una mejora clara de los excedentes empresariales del conjunto de las empresas, aunque haya unas que ganen más que otras, sino también una mejora en la estructura financiera de las mismas, que han dedicado cantidades crecientes a reducir su endeudamiento y mejorar su autofinanciación. Aunque no se tienen datos, señaló Mariano Rubio, todos los indicios de que se dispone apuntan a que durante el año que ahora termina la tendencia de mejora se ha mantenido, aunque es posible que algo menos acusada, lo que significará que, en términos de contabilidad nacional, el excedente empresarial habrá aumentado su peso sobre el conjunto de la renta nacional.Rafael del Pino, en nombre de la Asociación para el Progreso de la Dirección, explicó las grandes cifras del estudio y, aunque reconoció como válidos los datos, señaló que aún no se ha llegado al punto en el que se pueda decir que "Ias empresas están bien". La mejora es evidente, señaló, pero no suficiente, y, sobre todo, es bastante probable que muchas sociedades mantengan la vieja tendencia de "construir las cuentas de resultados al revés; es decir, se decide qué nivel de beneficios hay que reflejar contablemente y a partir de ahí se llega al nivel de ventas o del valor de la producción, aumentando en más o en menos el nivel de amortizaciones que se contabilizan".

Rafael del Pino, presidente de Ferrovial y consejero del Hispano, señaló que el volumen de amortizaciones representa el 5% del valor del inmovilizado, lo que significa que su rotación es de casi 20 años, período de tiempo que se considera demasiado elevado y que si se estuviera amortizando al ritmo que se considera normal, en torno al 9% del valor del inmovilizado, desaparecerían completamente los resultados netos de las sociedades.

El presidente de Ferrovial destacó que a pesar de estas cuentas escasas en amortizaciones la rentabilidad de los recursos propios -el capital riesgo- sigue siendo inferior a la que se puede obtener colocando el dinero en otros activos, como pueden ser los pagarés del Tesoro, lo que impide un relanzamiento de la inversión en la economía española y, por tanto, la creación de empleo. Rafael Termes, presidente de la Asociación Española de Banca, reconoció la validez de las tesis defendidas por el presidente de Ferrovial.