Nueve regiones españolas recibirán ayuda preferente del Fondo Social Europeo
El Consejo de Ministros de Asuntos Sociales de la CEE llegó ayer a un acuerdo para que nueve regiones españolas -Andalucía, Canarias, las dos Castillas, Extremadura, Galicia, Murcia, Ceuta y Melilla- sean consideradas como superprioritarias para acceder a las partidas especiales del Fondo Social Europeo. Los diez no han querido incluir a Asturias, por el momento, aunque de cualquier forma el ministro de Trabajo, Joaquín Almunia, considera que es un buen resultado.
Los diez acordaron en principio que un 44,5% del Fondo Social será reservado a esta categoría de regiones que además de las citadas incluyen a todo Portugal y Grecia, los departamentos franceses de ultramar, Irlanda, Irlanda del Norte y el Mezzogiorno italiano. La CEE financia hasta un 55% de los proyectos aprobados para estas regiones, mientras sólo va hasta un 50% para las regiones simplemente prioritarias (que en el caso español cubren todo el territorio). Un 43,5% de la población española estará, pues, en las regiones superprioritarias.España dispondrá de un plazo hasta el 1 de febrero de 1986 para presentar sus proyectos a concurso, sobre los que la CEE decidirá en abril. España espera lograr como mínimo unos 35.000 millones de pesetas de la CEE para estos fines.
Trabajadores autónomos
Una novedad decidida ayer para el conjunto de la CEE es que la acción del Fondo Social se ampliará también a los trabajadores autónomos.
El total de la partida destinada al Fondo Social Europeo para 1986, según el último proyecto de presupuesto de la CEE, asciende a unos 210.000 millones de pesetas en pagos. El consejo de ministros aprobaron ayer el programa comunitario de educación y formación en materia de tecnología Comett, destinado a fomentar a niver europeo la simbiosis entre los centros de estudios, los laboratorios y las industrias. 1986 será su año de definición, y entrará en marcha por un primer trienio, de 1987 a 1989, con una dotación comunitaria equivalente a 9.000 millones de pesetas (la otra mitad la tendrá que poner los Estados y los centros e industrias).
España espera beneficiarse de un 7% de estos fondos. Comett prevé varios tipos de acciones, como 10.000 plazas en la industria durante varios meses, para estudiantes que no hayan terminado aún su carrera, 350 plazas para que empleados dé la industria pasen periodos en centros de investigación y universidades europeas, y para que 350 científicos, a su vez, trabajen durante una temporada en alguna empresa.
Otro proyecto contemplado por Comett es un diseño sobre la utilización de nuevas tecnologías para la enseñanza a distancia y la contribución financiera al coste que suponga pasar a la dimensión europea en los centros de integración de universidad y empresa.
