UGT exige al Gobierno que liquide sus deudas pendientes con Renfe

La UGT se ha dirigido al ministro de Transportes y Comunicaciones, Abel Caballero, para solicitarle que el Gobierno liquide la deuda que tiene pendiente con Renfe. Según un portavoz de la federación de transportes del sindicato, el Estado no ha cumplido con los compromisos contraídos para el saneamiento financiero de la empresa, "en parte por la desidia que el anterior presidente de Renfe mostró con este asunto".

La federación de transportes de UGT ha elaborado una alternativa para el futuro de Renfe que pasa por una revisión al alza del contrato-programa de la empresa: para el año 1986 y la negociación de uno nuevo de carácter cuatrienal que entre en vigor en enero de 1987. Pero, además, UGT solicita que el Gobierno cumpla con los compromisos de saneamiento financiero de Renfe. Según el contrato-programa, al finalizar 1985 la deuda del Estado con la empresa debería ser solamente de 20,5 millones y, cuando sólo quedan dos meses para finalizar el año, asciende a unos 103 millones de pesetas.Según el sindicato, para el año que viene, debería procederse a una recalificación contable de los años 1984 y 85 con el fin de liberar fondos que se destinen a la inversión. Concretamente solicita que los 12.000 millones que se destinaron a jubilaciones anticipadas a cargo de la partida de inversiones, se contabilicen como gastos de personal y se destine una cantidad similar a inversiones en inmovilizado material (maquinaria... ). UGT añade, con respecto a este punto, que las jubilaciones anticipadas llevadas a cabo durante los dos últimos años "no sólo suponen incumplimiento del contrato-programa, que prevé la reducción de la plantilla simplemente por bajas y jubilaciones vegetativas", sino que ha arrastrado al régimen especial de la Seguridad Social de los ferrovarios al déficit cuando siempre había presentado superávit.

Entrada en Europa

El sindicato también plantea la necesidad de comprometer en 1986 inversiones que signifiquen poco desembolso durante ese año pero sea fuerte en los siguientes. Entre estos planes figura como prioritaria la línea Brazatortas-Córdoba para unir Andalucía- con el resto de España. El portavoz de la federación de transportes añadió, además, que hay que tener en cuenta nuestra incorporación a la CEIE para acceder a los fondos comunitarios de ayuda regional.Según UGT, la revisión del contrato-programa serviría para un ano de tránsito. En 1987 debería entrar en vigor otro contrato-programa distinto, negociado con los sindicatos y que sirviera de instrumento para cumplir los objetivos que se hubieran señalado en el plan estratégico de la compañía. Este plan, añade UGT, debería estar ya elaborado, tal y como establece el actual contrato-programa, pero la compañía ha incumplido este compromiso. El plan de Renfe, a su vez, debería encuadrarse en el plan general para todo el ferrocarril y éste en el de todo el transporte. Actualmente, una comisión creada a iniciativa del Ministerio de Transportes y Comunicaciones, estudia el Libro Blanco del Transporte para diseñar la política futura del sector, cuyas bases generales deben estar listas hacia la primavera del próximo año.Por último, la federación de transportes afirma que el nuevo contrato-programa debería realizarse bajo una filosofía distinta.