_
_
_
_

Israel y Polonia intercambiarán en breve 'representantes especiales'

Israel y Polonia mantienen contactos intensivos para intercambiar próximamente representantes especiales. Los dos países rompieron sus relaciones a iniciativa de Varsovia, hace 18 años, tras la guerra de los seis días. La existencia de las conversaciones fue confirmada el miércoles por el primer ministro israelí, Simón Peres, en Viena, antes de trasladarse a Estados Unidos. La noticia se conoció de forma casi simultánea al voto de la Unión Soviética en favor de una moción presentada por Kuwait en la ONU que pedía la expulsión de Israel de la organización mundial.Según los contactos establecidos entre israelíes y polacos, Varsovia abrirá una oficina en Tel Aviv para "tener mejor representados sus intereses en Israel". Al mismo tiempo, Tel Aviv hará lo propio en Varsovia.

Polonia, al igual que la mayoría de los países socialistas -Rumanía, fue la excepción-, siguió a la Unión Soviética en la ruptura de relaciones en 1967 a consecuencia de la guerra árabeisraelí.

En la referida votación de la ONU, Bulgaria y Checoslovaquia fueron los únicos países socialistas que votaron junto a la URSS a favor de la expulsión de Israel. Polonia, Hungría y la República Democrática Alemana (RDA) abandonaron la sala para no participar en la votación.

La apertura de estas oficinas no equivale a una reanudación de las relaciones diplomáticas mutuas, pero sí supone un importante paso adelante en esa dirección. Hungría tiene la intención de seguir el ejemplo polaco poco después.

Tal evolución en las relaciones de estos países del Este con Israel no es totalmente inesperada. Desde hace varios años, los intercambios comerciales y turísticos de Polonia y Hungría con el Estado israelí se han ido incrementando y diversificando.

Hungría fue la que rompió el fuego y adoptó medidas concretas: desde hace más de un año, cualquier israelí que se encuentre en tránsito en Viena puede trasladarse a Budapest sin necesidad de visado. En lo que se refiere a los intercambios comerciales, los húngaros tambien son los pioneros de los países socialistas.

Polonia ocupa un lugar relevante con relación a Israel debido a su pasado -la historia de la comunidad judía en ese país se remonta a más de 1.000 años-, pero también a un doloroso presente: tras el holocausto nazi, que exterminó a tres millones de judíos polacos, lo que quedaba de la comunidad judía en Polonia, unas 200.000 personas, huyó del antisemitismo polaco para instalarse en Israel.

A pesar de la ruptura de relaciones entre Varsovia y Tel Aviv, en 1967, la PKO, un banco estatal polaco fundado en Israel hace 52 años, no cerró sus puertas, y su director sigue siendo un polaco enviado por Varsovia. Este banco, uno de los pocos extranjeros autorizados a operar en Israel, es el que financia los intercambios comerciales con los países del Este y permite a los israelíes de origen polaco enviar dólares a sus parientes y amigos de Polonia.

El "representante especial" que será enviado por Varsovia se instalará en el edificio donde tiene su sede la PKO.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_