La CEOE y la patronal francesa analizan el ingreso de España en el Mercado Común

Una delegación de la patronal española, encabezada por José María Cuevas, presidente de la patronal CEOE, celebró ayer una extensa reunión de trabajo con sus colegas del Consejo Nacional del Patronato Francés (CNPF) para examinar las repercusiones de la ampliación de la Comunidad Económica Europea, prevista para enero del año próximo.

José María Cuevas y otros directivos de la CEOE fueron recibidos también por el primer ministro Laurent Fabius, con quien comentaron la situación económica y social de los dos países. Fabius les aseguró que no existe ningún problema que impida a la Asamblea Nacional ratificar el tratado de adhesión de España en las fechas previstas."Esta visita", explicó Cuevas, "corresponde a un programa que hemos elaborado para mantener conversaciones con los empresarios de todos los países miembros de la CEE". El presidente de la CEOE, afirmó que los dos grupos habían intercambiado información de primera mano sobre cómo ven los empresarios franceses y españoles las repercusiones de la ampliación del Mercado Común y que se estaba estudiando la posibilidad de llegar a acuerdos de cooperación "para fijar estrategias empresariales de cara a la CEE". Igualmente se hablo de la posible apertura de oficinas mixtas CEOE-CNPF, tanto en Madrid como en París.

José María Cuevas señaló que, en su opinión, los empresarios franceses no se plantean ya si el tratado de adhesión de España es bueno, malo o regular, sino cómo elaborar estrategias prácticas que les permitan sacar el mayor beneficio posible. Interrogado sobre si un sector de la CNPF comparte las advertencias del líder de la oposición conservadora, Jacques Chirac, en el sentido de que "Francia deberá renegociar el tratado de ingreso de España", el presidente de la patronal comentó que "los políticos cuando están en la oposición dicen una cosa, y cuando llegan al poder, hacen otra".

Los empresarios franceses y españoles se concentraron, sobre todo, en el estudio de los sectores industriales que más interés ofrecen cara a la ampliación: industria agroalimentaria, robótica, electrónica, aeronáutica, textil y química, así como en los intercambios financieros. La balanza comercial entre los dos países arrojó e 1984 un saldo positivo para España de unos 168.000 millones de pesetas, cifra que se superará probablemente este año.

El presidente de la patronal española señaló que el primer ministro les había informado sobre el alcance industrial del proyecto Eureka, destinado a la actuación de una Europa de la tecnología. "Nosotros le planteamos por nuestra parte que resulta absurdo que países terceros, no miembros de la Comunidad, obtengan mejor trato que España durante el período transitorio, pero Fabius se limitó a admitir que era un problema, sin ofrecer soluciones", declaró Cuevas.