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Un diputado del Grupo Popular pide al Congreso que conceda su suplicatorio

Anabel Díez

El diputado del Grupo Popular Javier González Estéfani ha remitido una carta a todos sus compañeros de escaño rogándoles voten a favor de la concesión de un suplicatorio a fin de ponerse a disposición de los tribunales y probar su inocencia respecto a una querella de la que ha sido objeto por la presunta extensión de un cheque sin fondos de algo más de dos millones de pesetas. Sin la autorización de la Cámara, y en virtud de la inmunidad parlamentaria, este diputado no podría ser procesado.

Este parlamentario del Partido Demócrata Popular (PDP), en carta dirigida a los 349 diputados del Congreso, acompañada de un informe detallado de los hechos, les pide que voten a favor del suplicatorio en la Comisión del Estatuto de los Diputados, que hoy se reúne para estudiar su caso.

"Te ruego votes favorablemente la concesión del suplicatorio con el fin de que, al renunciar a mi inmunidad, puedan los tribunales competentes demostrar la improcedencia de la citada denuncia y, por consiguiente, mi buen nombre quede al margen de cualquier sospecha de haberme amparado en mis privilegios como persona aforada en un tema cuyo trasfondo, además, es de naturaleza mercantil", escribe González Estéfani, al que también anima la intención de

"acotar en sus justos términos la inmunidad parlamentaria».

Otro caso de inmunidad se verá mañana en el Senado con el caso Barral. El senador socialista Carlos Barral tiene pendiente la concesión de un suplicatorio desde noviembre de 1983, por insistencia de su demandante, fecha en la cual sus compañeros votaron en contra. Fue la primera vez que en el seno del grupo socialista se rompía la disciplina de voto. Desde la dirección del grupo, y a propuesta del propio interesado, se propugnaba la vía libre para que actuara justicia. En esta ocasión el clima previo a la votación es favorable a concesión del suplicatorio.

El 'caso Elósegui'

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Barral fue demandado por un particular por presuntas calumnias e injurias vertidas en un artículo con fecha anterior a que éste fuera parlamentario, por lo que se considera que el manto protector de la inmunidad no puede en esta ocasión cubrirle. Caso diferente es el del senador nacionalista vasco Joseba Elósegui, que sustrajo una ikurriña del Museo del Ejército, y que tanto por los senadores como por el dictamen del Tribunal Supremo se entiende que fue una acción inmersa en un contexto político, y, por tanto, no es admisible la concesión de un suplicatorio.

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Sobre la firma

Anabel Díez
Es informadora política y parlamentaria en EL PAÍS desde hace tres décadas, con un paso previo en Radio El País. Es premio Carandell y Josefina Carabias a la cronista parlamentaria que otorgan el Senado y el Congreso, respectivamente. Es presidenta de Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP).

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