Entre el 'porno-pop' y el 'pop-guarro'
Decenas de grupos musicales escriben letras irónicas y agresivas
Son decenas de grupos que intentan abrirse paso por medio del rock, del pop y de otras variantes a veces inventadas. Lo importante es la música, pero las letras les dan una marca de estilo. Desde el intimismo hasta la pornografía, intentan cautivar o agredir a sus seguidores urbanos. Sus nombres suelen nacer de casualidades o referencias ingeniosas, y los logotipos, la ropa y la pose física e ideológica permite a los que logran una óptima imagen grabar discos y triunfar, muchas veces de una forma fugaz, como nacieron. Varios de los letristas de estos grupos hablan aquí de las obsesiones que los mueven.
Julián Hernández, estudiante de guitarra clásica y admirador de John Williams y Julian Bream, toca la batería en Siniestro Total. El título del grupo surgió de la denominación que emplean las compañías de seguros cuando un coche se accidenta: si el valor del daño supera el 75% del coste, es declarado siniestro. total. "Eso es lo que nos pasó", dice, "a varios miembros del grupo hace cuatro años, cuando nos dimos un golpe en la cabeza y así pasamos de ser un grupo de buenos estudiantes a un grupo de pop-guarro".
Para Hernández lo más importante a la hora de escribir una letra es buscar una rima que funcione como leitmotiv. Lo demás, insólito y apresurado, rodea a las palabras clave. Una de las canciones que ahora prepara trata de la persecución de bosquimanos en el desierto de Kalahari. En este nombre está la clave, por una razón fundamental: rima con guachi-guari-guari. "La cosa es que rime", afirma.
Las lecturas que en ocasiones han inspirado a Hernández son sobre todo Mortadelo y Filemón y las novelas de Henry Rider Haggard, el autor de Las minas del rey Salomón. Una de sus canciones se llama Bajo el volcán, que está escrita antes de la película de John Huston y trata "de volcanes", dice, "no de Cuernavaca ni del cónsul Firmin". "Aquí nos vino muy bien", añade, "que Teide rimase con Baby, y lava con Abba (el grupo musical sueco)".
El nombre de Semen-up, grupo de Vigo, como Siniestro total, surgió de una hipótesis. El cantante y letrista, Javier Vergara, se había inventado un festival de porno-pop para el que necesitaba una bebida refrescante patrocinadora. Esa bebida es Semen-up. Vergara se plantea el porno-pop desde un punto de vista empresarial. "En este país", dice, "debe haber cientos de grupos intentando salir adelante. Yo no soy músico ni letrista ni bailarín, por eso creí que como el asunto del porno va para arriba sería un buen medio de promoción".
Sus letras asegura que intentan dar un paso adelante sobre las de Julio Iglesias. Lo que en las canciones tradicionales se sugiere y no se nombra, Semen-up lo plantea de una forma directa. "Mientras yo me concentro, chúpala más adentro, que ya llega el momento y lo has hecho muy bien" es una estrofa de la canción que los lanzó.
Vergara es aficionado a la literatura de la revista Penthouse. Ahora está trabajando sobre el lenguaje erótico castellano, que es, dice, "eufemístico o chabacano; el equilibrio es muy difícil". Acaba de leer Once mil vergas, de Apollinaire, que le servirá de inspiración en un futuro.
Considera que sus canciones son "necesarias", y afirma que su strip tease cuando canta No te burles del tamaño de mi miembro viril "lo exige el guión, porque la letra narra unos momentos angustiosos por los que muchas personas han pasado aunque no lo quieran reconocer".
Diseños de marca
La empresa Nuevos Medios, que se encarga de promocionar a varios grupos y cuyo logotipo fue realizado por Joan Miró, ha intentado que los detalles que rodean a sus grupos estén conectados con ese mundo de la moda y del diseño, que ayuda a mezclar lo que promocionan con otras ramas diversas de la movida y la creación.
Así, el logotipo de Golpes Bajos está diseñado por Francis Montesinos. El de La Mode se basa en el de la revista de moda Vogue. Los miembros del grupo Magia Blanca, cuya cantante es una modelo de 22 años, Cristina Rosenvinge, aparecen en la portada de su disco vestidos ella por Juan Rufete y ellos con chaquetas de Antonio Alvarado. Se trata de crear una imagen, apostar por la elegancia o lo anticonvencional, según los casos, con el fin de que las carencias musicales y de letras, algo que la técnica y la imaginación puede perfeccionar, se vean arropadas por el estilo.
Un estilo totalmente distinto el de Magia Blanca al de Decibelios, grupo catalán de punk, de línea skin head, que se dio a conocer en su primera etapa como "la banda más repugnante del Estado". Aficionados a obsequiar al público con sangre y vísceras de animales, este grupo, que tiene una canción en catalán de durísimos términos para el Ayuntamiento de Barcelona, recientemente actuó en la plaza de Catalunya bajo el amparo municipal.
Para Fray, su cantante, de 28 años, sus temas contra la Diputación o la Seguridad Social intentan ser un revulsivo. "Es posible que no arreglemos nada", dice, "pero pinchamos y estamos contra el sistema, lo que no quiere decir que nuestras alternativas sean válidas". Canciones como Boca de Dios, El seminarista y los boy scouts o En estéreo (si lo tienes mono, te jodes) son el soporte de letras agresivas y de dificil clasificación: "Cero grados, mil ideas, un escaparate y una piedra, mierda".
Tiempos líricos
Mientras Antón Reixa, líder de Os Resentidos (véase EL PAIS de ayer), escribe canciones en gallego que tienen un suave toque nacionalista ("para los gallegos, que no tenemos nada que perder, los paradigmas de la marginación esperanzada son los pensionistas y la minoría sij"), Germán Coppini, santanderino de 23 años afincado en Vigo y ahora en Madrid, cerebro de Golpes Bajos -que acuñó una frase de éxito en el título de una de sus canciones, Malos tiempos para la lírica-, parece estar ahora en una fase de escritura muy intimista.
"Mis personajes son mundanos", dice, "y me gusta encumbrar a poetas locos a título de santos". Estos personajes quieren estar por encima de las convenciones. Coppini es el único preguntado para el que la letra es lo que más le interesa. Ahora le obsesiona el hecho de haber venido a vivir a Madrid, y éste será posiblemente el enfoque de su próximo disco.
A Coppini le interesan las matizaciones. De una forma educada ha escrito canciones ambiguas ("la mollera de este país quizá no dé para tanto") como Desconocido, cuya letra contiene ecos whitmanianos: "Y me llamas de amigo, cuando mi cabeza sobre tu pecho no ha vuelto a estar recostada (...), cuando he perdido tu espalda, cuando encontramos sólo vacío".
Entre la recuperación de la infancia que ha buscado en su disco el grupo La Dama Se Esconde (título nacido de una referencia a la película de Orson Welles, La dama de Shangai, y otra al juego del escondite) y las canciones intimistas y lentas de Los Esclarecidos; entre el expresionismo que sugiere el nombre de Gabinete Caligari y la expresión corporal de Mar Otra Vez (cuyos componentes aparecen desnudos en una fotografia de promoción), se mueven muchos grupos, irónicos, agresivos o intimistas, reflejos inmediatos de lo que va a pasar.
Babelia
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