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El rancho de Mel Gibson

Andrés Fernández Rubio

El actor protagonista de las tres películas de Mad Max, Mel Gibson, es un neoyorkino de 29 años que empezó en Australia en el teatro, interpretó obras como Romeo y Julieta y Esperando a Godot, y fue descubierto por George Miller para representar a un héroe en la pantalla. Es un joven de complexión atlética que mide más de un metro ochenta y cuya afición extracinematográfica es cuidar de su rancho, situado a 600 kilómetros al suroeste de Sidney, y de 300 cabezas de ganado vacuno. "Me gusta ver cómo nace lo que planto", afirma.Gibson tiene aspecto de montar en cólera si se muere una res o no crece el forraje. Su padre tuvo once hijos y él tiene ya cuatro. Contesta con enorme desgana y sólo parece interesarse al hablar de su rancho. Mientras lo hace juega con el vaso, dibuja en un papel, hace crujir los dedos con mucho ruido y las manos son rudas, de campesino.

Para Miller este actor "es instintivo, aprende muy rápido". Cree que sería un buen director de cine. Gibson se limita a sonreír condescendiente y dice que su aspiración sería como mucho ejercer labores de producción. Le resulta extremadamente aburrido hablar de sí mismo todo el tiempo y se nuestra preocupado de que la gente crea que le conoce y le trate como si él fuese un antiguo amigo. Piensa que en el cine hay que contenerse más que en teatro y procura, ahora que es famoso, ser el de antes y "eludir las interferencias".

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