Un filón llamado Tokio Disneyoland
El volumen de dinero que se movió durante 1984, primer año del parque de atracciones de Walt Disney en Japón fue de 420.000 millones de yens (unos 290.000 millones de pesetas). De ellos, la multinacional norteamericana invirtió 38,3 billones de yens, o sea el 21,9% de los gastos totales. Al parecer, en el caso español la distribución del capital a invertir sería parecida, aunque Walt Disney Productions ha insistido en conservar el 50%. de la propiedad del Eurodisney y el resto se repartiría en participaciones europeas. En el caso de Japón, la Disney cedió la propiedad a cambio de una jugosa cifra en royalties.Según este informe, el 80% de los gastos realizados antes de la apertura fueron invertidos en la construcción. Sin embargo, después de la misma, el 75% de los gastos se localizó en las industrias periféricas. Transportes que la industria que movilizó mayores recursos, ocupando el 33% del total. Le sigue en importancia el acomodo, con el 18%, y a continuación vienen comidas, bebidas y compras.
El volumen de la producción inducida por el Tokio Disney land equivale a la producción ge nerada por la industria japonesa de los equipos de informática o la de los transportes aéreos. En este caso, el volumen total ascen dió a 1,483.5 billones de yens, a finales de 1983. De la distribu ción de estas cifras se observa que es la industria manufacture ra la que sale más beneficiada, con una participación del 46, 5% antes de la apertura de Tokio Disneyland y un 60% después de la misma. Los sectores más beneficiados fueron los de servicios (sobre todo restaurantes, hostales, hoteles, agencias de viajes) y transportes, como trenes, autobuses y aviones.
Los gastos de los visitantes ascendieron a 212 billones de yens. Dentro del Tokio Disneyland, cada turista gastó una media de 16.000 pesetas, que se reparten entre el consumo de comida y bebida, el transporte, la entrada y algunas compras.
Repercusiones generales
Los efectos económicos locales ascienden a 522,5 billones inducidos, hasta finales de marzo de 1984. En términos más concretos, estas cifras tienen repercusiones claras en sectores como el empleo, donde se crearon 150.000 puestos de trabajo. Aquí se debe destacar que antes de la apertura se dio empleo a 47.497 trabajadores, mientras que después de la misma se crearon 102.928 puestos de trabajo. Tan sólo en la industria terciaria hubo 86.847 nuevos trabajadores. Caso de que el Eurodisney se instalara en España, se prevé que crearía unos 40.000 empleos directos, y otros 35.000 de manera indirecta.El informe afirma que el 90% delas industrias que hoy forman parte del negocio creado por el parque tenían noticias del fenómeno Disney antes de su instalación. Más o menos, la mitad de estas compañías estaban dispuestas a participar en la aventura.
Casi el 20% de estas industrias se han adaptado, con su incorporación al parque, a las más modernas técnicas de marketing y operan con alto nivel de tecnología. El 80%. restante se muestra muy interesado en estas innovaciones. Como dato curioso, el 35% de la industria del ocio que compite directamente con Disney afirma que no ha sufrido efectos negativos y un 64%. no ha notado ningún efecto.
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