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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

La mujer, en EL PAÍS

En EL PAÍS de 31 de julio leo un editorial titulado De Nairobi a España, consagrado a lásituación de la mujer en nuestra sociedad y a la lucha por superar la discriminación entre los sexos.En él se afirma que "la discriminación sexista permanece visible", y el autor se sorprende de que con los socialistas apenas se haya modificado esta situación. Cita concretamente el hecho de que ninguna mujer forme parte del Gobierno y que únicamente 15 mujeres sean directoras generales, sobre un total de 188. De ello se deduce que los viejos prejuicios siguen teniendo arraigo entre los jóvenes socialistas.

Lo que choca, sin embargo, es que se haga en la misma página -y en el mismo recuadro- en que se recoge la composición del cuadro directivo de EL PAÍS y de su empresa editora, PRISA. De él se desprende que:

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1. Ocho personas -cuyos nombres aparecen en caracteres más destacados- asumen responsabilidades superiores, tanto de carácter editorial y gerencial como de dirección de la redacción. Todas ellas son hombres. Es decir, lo que podríamos considerar el gobierno de PRISA y EL PAÍS está compuesto exclusivamente por hombres.

2. En un nivel inferior -representado con caracteres menos destacados- aparecen 37 personas que ocupan puestos ejecutivos de administración y redacción. De ellas, sólo una es mujer. Es decir, al nivel equiparable al de los directores generales de los ministerios, la proporción de mujeres en EL PAÍS es de algo menos del 3%, mientras que en la Administración asciende a un 9% aproximadamente. Si comparamos la composición de los cuadros superiores del Gobierno y de EL PAÍS, ustedes están todavía a un nivel que no llega a un tercio de la proporción alcanzada por el Gobierno, por insuficiente que ésta sea.

Es éste un caso clásico del crítico que señala la paja en el ojo ajeno, mientras que no quiere ver la viga en el propio. EL PAÍS debería cuidar más su propia casa. En todos sitios cuecen habas.-

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