Un joyero, retenido en su casa mientras le desvalijan su establecimiento

José Montoro Gregorio, de 52 años, fue retenido ayer a la fuerza en su domicilio mientras unos delincuentes obligaban a su hija, María Paloma, de 24 años, a que les abriera la joyería, situada en la calle Francos Rodríguez, 9. Los ladrones se apoderaban de un muestrario valorado en unos 40 millones de pesetas.Según la policía, el asalto se produjo cuando el industrial regresaba a su domicilio poco después de las 14 horas. En el descansillo del quinto piso del inmueble, de la calle Bravo Murillo, le esperaban tres hombres de unos 30 años, uno de ellos enmascarado con una media, y armados con pistolas. Los delincuentes, que amenazaban al portero de la finca, obligaron a ambos a entrar en el domicilio del comerciante, donde les amordazaron y encadenaron.

Dos de los asaltantes obligaron a la hija del industrial a que les acompañara a la joyería donde, tras apoderarse de los muestrarios, la dejaron encerrada. Llamaron por teléfono al cómplice que había quedado en la vivienda para que se diera a la fuga.