El comienzo de una ofensiva preelectoral

El PSOE comenzó a preparar, en la semana que hoy concluye, su estrategia electoral y lo que será su ofensiva, repetidamente anunciada, de penetración en la sociedad. Durante cinco días, la tradicional escuela de verano, celebrada este año bajo el lema Proyecto del partido, compromiso del Gobierno, ha albergado a ministros, secretarios de Estado, subsecretarios y directores generales que, de manera casi invariable, han elogiado la labor del Ejecutivo en sus dos años y medio de mandato. La insistencia en estos logros servirá de base, a partir del otoño, para la preparación de una campaña electoral ante la cual los socialistas "pueden sentirse, tranquilos", según dijo ayer el vicepresidente Alfonso Guerra, en la sesión de clausura.

Los mentís a las acusaciones de que el PSOE se derechiza, así como los ataques a la derecha y también a la "incomprensión" de los medios de comunicación ante la tarea realizada por el Gobierno, han proliferado en esta escuela de verano, cuyos trabajos se han celebrado sólo parcialmente a puerta abierta.

Al tiempo, se intentó profundizar en el nunca resuelto problema de las relaciones entre el partido y el Gobierno: "Un Gobierno no puede olvidar al partido que le apoya, pero tampoco puede ser instrumentalizado por ese partido", fue el resumen de la situación hecho ayer por Guerra. Tres días antes, el secretario de Organización, Jose María Benegas, había dado a entender que el partido no tiene por qué entrar en la resolución de una remoción o una crisis del Ejecutivo, cuestión que sólo compete al jefe del Gobierno.

Todo ello sugiere que el PSOE seguirá cumpliendo un papel no crítico de las acciones del Ejecutivo, evitando a toda costa el modelofrancés, que refleja en la actualidad al estallido de las tensiones entre el responsable del partido, Lionel Jospin, y el del Gobierno, Laurent Fabius. En cualquier caso, el PSOE prepara una campaña -varias veces aplazada- de explicación de la labor del Gobierno, campaña que, probablemente, se iniciará a finales de .septiembre, cuando se cumplan los 1.000 días de la toma de posesión del primer Gobierno socialista existente en España desde hace casi medio siglo. Esta campaña insistirá, en la línea que ha venido desarrollándose a lo largo de esta escuela de verano, en los cambios estructurales y la modernización de la sociedad española operados durante el mandato socialista.