El poderoso y popular rey Juan Carlos

(...) Claramente, con 47 años, el rey Juan Carlos I de España no es un hombre nada común. Tampoco es un rey como cualquier otro.En una época en que las monarquías aparecen como una atracción turística, el Rey de España tiene un poder real. En su palacio, situado en las afueras de Madrid, recibe constantemente a líderes políticos, militares y, a hombres de negocios. Así, políticos de izquierda y de derecha, formulan propuestas para llegar a un compromiso. Y en España, donde todavía existen cenizas de la guerra civil de los años treinta, el consenso es valorado por encima de todo.

El Rey habla también con huéspedes extranjeros, incluyendo al ministro de Asuntos Exteriores soviético y los ministros de Comercio y de Hacienda de China. Habla de los grandes temas internacionales: favorece la plena integración de España en la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y fue muy activo en la larga negociación que llevó al ingreso de España en la Comunidad Económica Europea; cree, además, que España no puede fraccionarse políticamente en diversos Estados regionales.

Esta semana el Rey de España está en París con motivo de una visita de Estado con el objetivo de renovar los lazos de amistad con Francia. Se reúne con François Mitterrand, el presidente socialista de Francia que apoyó activamente la solicitud de ingreso de España en el Mercado Común Europeo.

Nadie en España está tan bien informado como el Rey sobre las Fuerzas Armadas de su país. Inspira respeto en el Ejército y manifiesta a las tropas, algunas veces reticentes, que la democracia en España continuará y permanecerá.

Juan Carlos trabaja cómodamente con el presidente del Gobierno, Felipe González, aunque el Rey no intervino para nada en la remodelación del Gabinete ( ... ).

Los españoles piensan que el puesto Rey ha recuperado la imagen internacional de España después de 40 años con la figura ridícula del general Francisco Franco. El Rey viaja mucho. Lee la Prensa internacional. Habla perfectamente inglés, francés y portugués, así como algo de alemán e italiano ( ... ).