El embajador español en Líbano, llamado a consultas a Madrid

El ministro español de Asuntos Exteriores, Fernando Morán, ha llamado a consultas al embajador en Líbano, Pedro Manuel de Arístegui, para que le cuente de palabra la situación de la representación diplomática y de la colonia española en Beirut a raíz de los últimos acontecimientos, según declaró a EL PAIS un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores.Arístegui tiene previsto salir hoy de Beirut por barco desde el puerto de Junieh, situado en el sector cristiano de la capital libanesa.

El líder de la milicia shií Amal, Nabih Berri, aconsejó al embajador de España en Líbano, Pedro Manuel de Arístegui y Petit, que no cruzase "durante por lo menos una semana" al sector musulmán de Beirut, para no poner en peligro su seguridad tras la condena infligida el miércoles a dos miembros de dicha organización armada, según una fuente diplomática española.

Nabih Berri se mostró indignado por los 23 años de cárcel impuestos a Mustafá Jalil y Mohamed Rahal por el intento de asesinato en Madrid, el pasado septiembre, de un funcionario libio que sólo resultó ligeramente herido, e insistió en la necesidad de concluir rápidamente un acuerdo con España que les permita cumplir su condena en Líbano.

Berri ha ordenado también la detención de Mahmud Rahal, hermano de uno de los acusados en Madrid y que el pasado mes de octubre secuestró, junto con otro shií, al embajador español. Según fuentes shiíes allegadas a los dos detenidos en España, Mahmud Rahal llamó ayer por la mañana al embajador y le amenazó con "empezar a trabajar" si en el plazo de una semana no era liberado en Madrid Mohamed Rahal.

La residencia del jefe de misión español está situada en el sector cristiano de la capital, pero la cancillería se encuentra en zona musulmana.

Arístegui contestó a Berri, según el diplomático que tuvo acceso a un telegrama enviado por la Embajada en Beirut, que en ese caso no tendría más remedio que ordenar el cierre de la cancillería, ubicada en el oeste de la capital, obligando así a los musulmanes a que se atrevan a acudir a su residencia, en el pueblo cristiano de Hadath, para obtener visados.