El secuestro aéreo de Beirut
Esperamos estar equivocados, pero parece que va a llevar tiempo liberar a los últimos 43 pasajeros secuestrados de la TWA, retenidos en alguna parte de Beirut. Han llegado a ser los prisioneros de los intereses de poder de tres sociedades. La eficacia del presidente Reagan en solucionar su liberación depende de lo bien que resista las impacientes demandas para forzar o precipitar la apelación al rescate.Existen muchos crímenes aquí. Los asaltantes son culpables de asesinato así como de secuestro. Las autoridades de Grecia son culpables de la increíble negligencia de permitirles subir al avión y de negociar. Los Estados Unidos son culpables de no haber castigado a Irán por haber dado asilo a los asesinos de dos americanos secuestrados el año pasado. Pero las represalias necesarias y las medidas preventivas deben esperar hasta que las actuales víctimas estén a salvo. (...)
Israel había planeado apaciguar a los resentidos shiíes con la liberación de los 766 secuestrados la semana pasada, pero fue aplazado por el secuestro en Líbano de algunos soldados finlandeses de las Naciones Unidas. Con el asalto a la TWA, cualquier liberación adquiere inmediatamente un nuevo significado en la política isiaelí. Un Gobierno laborista, actualmente en guerra, que canjeó a 1.150 árabes por tres israelíes capturados en Líbano, rehusa ahora ceder a. un nuevo acto de terrorismo, a menos que Reagan lo pida.
Reagan no lo pedirá, y es difícil dialogar con él. El tema no es la liberación de los 766 secuestrados -los israelíes se quieren deshacer de ellos-, sino cómo. (...)
La solución podría todavía involucrar a otros grupos, como la Cruz Roja Internacional, pero llevará todavía mucho tiempo a todas las partes, definir el compromiso en términos aceptables. La vía apropiada para los americanos es respetar las buenas decisiones de Reagan y, con paciencia, dejarle sacar lo mejor de una mala situación.
18 de junio
