Una espiral que dura casi dos meses

La actual espiral terrorista de ETA se inició el 27 de abril último con la campaña de colocación de explosivos en las zonas turísticas del Mediterráneo, y supone el periodo de mayor actividad del terrorismo desde la llegada de los socialistas al Gobierno, con 15 muertos y más de 20 heridos. Durante los dos primeros años de mandato del PSOE, las acciones terroristas de ETA experimentaron una disminución, pero en los dos últimos meses los atentados se han multiplicado, conmocionando en algunas ocasiones a la opinión pública. Así ocurrió en el caso de la muerte de un niño en Pamplona el pasado 30 de mayo. Una bomba activada a distancia por miembros de ETA estalló en el momento en que el niño, de 14 años, se encontraba en la puerta de su domicilio, al pasar dos coches de policía, uno de cuyos ocupantes también murió.El 12 de junio, tres atentados ensombrecieron la celebración de la firma de la adhesión española a la CEE, al morir asesinados en Madrid un coronel auditor y su conductor, un policia nacional que intentaba desactivar un coche bomba, y un brigada de la Armada en Portugalete.

Únicamente se registró tanta intensidad en las acciones terroristas durante los años 1979 y 1980, es decir, tras la aprobación de la Constitución y hasta el golpe de Estado del 23 de febrero. En 1979 el número de víctimas de ETA fué de 61 muertos, y en 1980 de 75.

El periodo de mayor recrudecimiento del terrorismo fue el comprendido entre el 3 de septiembre y el 27 de noviembre de 1980, en el que se registraron numerosos atentados, con un resultado de 31 muertos; de ellos, dos militares, nueve guardias civiles y 12 civiles. Entre estos se encontraban los dirigentes de UCD José Ignacio Ustarán, Jaime Arrese, y Juan de Dios Doval. También fue asesinado Vicente Zorita, candidato autonómico de Alianza Popular.