Serra afirma que el asesinato del brigada en Portugalete produce dolor, pero no desune al Ejército

"Detrás de este atentado no hay otro resultado que una familia destrozada", dijo el ministro de Defensa, Narcís Serra, al finalizar el funeral celebrado ayer en Bilbao en memoria del brigada de la Armada José Millarengo, asesinado la víspera en la localidad vizcaína de Portugalete.El ministro añadió: "Si con este nuevo acto sangriento los terroristas pretenden separar a la sociedad de sus Fuerzas Armadas están equivocados, porque el resultado es justamente el contrario. El Estado, sin perder la serenidad, pero tampoco el pulso, acabará con esta lacra. Para ello se necesita una serie de medidas que estamos decididos a tomar para que España tenga paz en el futuro".

En el interior del templo, la iglesia de San Vicente, ocupaban puestos destacados, junto al ministro y los familiares de la víctima, el consejero vasco de Interior, el delegado del Gobierno en Euskadi, el diputado general de Vizcaya, el alcalde de Bilbao, el jefe del Estado Mayor de la Armada y el capitán general de la VI Región Militar, así como mandos de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado y de la policía autonómica vasca y representantes de los partidos políticos.

El féretro, conducido desde la Comandancia de Marina a hombros de oficiales y suboficiales de la Armada, fue introducido en el templo a los sones del himno nacional, interpretado por la banda del regimiento Garellano 45.