El Gobierno cree que el plan jordano facilitaría las relaciones entre España e Israel

El Gobierno español considera "muy positivos" los avances obtenidos en el plan de paz jordano-palestino durante la visita del rey Hussein a Washington, y estima que la aceptación por parte de Israel de participar en este proceso negociador "facilitaría" el previsto intercambio de embajadores entre Madrid y Tel Aviv, según manifestó ayer una fuente gubernamental española.Esta misma fuente aclaró que en ningún caso es condición española la aceptación israelí, si bien ésta, al ayudar al proceso pacificador en la zona, cumpliría con los deseos del Gobierno español, que según reiteradas declaraciones oficiales pretende que el intercambio de embajadores sirva a los intereses españoles y a la pacificación de Oriente Próximo.

Durante la reciente visita a Madrid del presidente estadounidense, Ronald Reagan, el secretario de Estado norteamericano, George Shultz, recibió ya una respuesta positiva por parte española cuando se interesó por la posibilidad de que la aceptación israelí del plan jordano-palestino ayudase al intercambio de embajadores.

España -que en el pasado no apoyó expresamente ninguno de los diversos planes para la solución del conflicto de Oriente Próximo- hizo patente su respaldo al plan de paz jordano-palestino durante la visita que el rey Hussein de Jordania realizó a Madrid a finales del pasado mes de marzo. En aquella ocasión, el brindis pronunciado por el rey Juan Carlos durante la cena de gala que ofreció al monarca jordano contuvo un expreso apoyo a este plan. Igualmente, el ministro de Asuntos Exteriores, Fernando Morán, reiteró este respaldo español durante la visita oficial que realizó a mediados de mayo a Egipto.

El presidente del Gobierno español, Felipe González, ha insistido en diversas ocasiones en que el intercambio de embajadores entre España e Israel se realizará antes de las próximas elecciones. En círculos diplomáticos se cree, no obstante, que éste no se produciría, en ningún caso, antes del verano, e incluso señalan como probable que no se haga antes del próximo año, a pesar de las probables presiones de los grupos de presión proisraelíes.