Numerosos amigos en la sala
Los turcos y búlgaros procesados en Roma cuentan con sus seguidores en la sala-bunker del foro. En el espacio reservado a los "observadores extranjeros acreditados" se encuentran los familiares de Serguei Antonov. Al final de la sala están unos 70 turcos llegados desde la RFA para alentar a su jefe, Musa Sedar Celebi.Junto al embajador de 'Bulgaria en Roma, que está acompañado por su esposa, y de los asesores legales se sientan en el aula la hija de Antonov, Ana, que tiene 14 años y que, según sus propias manifestaciones, no se muestra demasiado impresionada por ver a su padre entre rejas. "Saldrá pronto, porque será demostrada su inocencia". Junto a ella, Ivanka, la madre del acusado, y también la hermana de éste, Tania. Quien no se ha desplazado a Roma, sin embargo, es la esposa de Antonov, Rositsa, a pesar de que figura entre los cerca de 100 testigos convocados para el proceso.
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