Zaragoza prohíbe el paso de mercancias peligrosas
El alcalde de Zaragoza, el socialista Ramón Sainz de Varanda, ha hecho público un bando por el que se prohibe el tránsito y estacionamiento en el casco urbano de la ciudad de todo tipo de vehículos, que lleguen tanto por carretera como por ferrocarril, cargados con sustancias explosivas, tóxicas, incendiarias o radiactivas. En la disposición de la alcaldía se dictan instrucciones a los servicios de inspección municipal para que vigilen y verifiquen los cargamentos de los vehículos y, en su caso, ordenen a sus conductores la inmediata salida del término municipal.El delegado del Gobierno en Aragón, Angel Luis Serrano, ha solicitado, por escrito y de forma oficial, al alcalde de Zaragoza, Ramón Sainz de Varanda, los últimos decretos o bandos referentes a la prohibición del tránsito de mercancías peligrosas y vehículos de guerra por el casco urbano de la ciudad. El delegado ha conocido tales medidas a través de los medios de comunicación y quiere leer oficialmente el texto íntegro, estudiar su fondo y el alcance jurídico del mismo, según manifestó a este periódico.
Zaragoza es un punto clave en las comunicaciones, tanto por carretera como por ferrocarril, ya que une Cataluña con el resto del país, así como la zona de Levante y del Norte con el centro, por lo que la medida del alcalde podría acarrear problemas si llega a cumplirse. Sainz de Varanda ha solicitado información a Renfe sobre el número y el tipo de trenes que cruzan la ciudad, ya que no dispone de datos al respecto. El Ayuntamiento podría no tener competencias para prohibir a los trenes cruzar la ciudad, y la regulación de dicho tráfico dependería del ministerio correspondiente y de Renfe, que, por otra parte, asegura que sólo pasan trenes con butano.
La actitud del alcalde se interpreta como una presión para reivindicar la construcción de la ronda norte del ferrocarril, que, a través de varios ramales, sacaría fuera de la ciudad las cargas peligrosas y evitaría "un descarrilamiento, incendio o explosión" en el actual paso cubierto bajo las avenidas de Goya y Tenor Fleta. El proyecto, cuyo trazado partiría de la nueva estación de contenedores, quedó paralizado hace un año al considerar Renfe que no era rentable, dado su alto coste, unos 6.000 millones de pesetas.
Entonces se dijo que diariamente atravesaba el centro de Zaragoza al menos un tren con mercancías peligrosas. Esta ciudad está a mitad de camino entre Madrid y Tarragona, donde se hallan las principales factorías de la industria química española.
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