Duras críticas al plan del Gobierno de condicionar el referéndum sobre la OTAN

La oposición, de derecha e izquierda, criticó ayer duramente las declaraciones efectuadas el pasado lunes por el presidente Felipe González, señalando que el Gobierno no considerará vinculante el resultado del referéndum sobre la OTAN si no se da una suficiente participación ciudadana en la consulta popular. Calificativos como "churrigueresco", "circense" y "maniobra de diversión y ceremonia de la confusión" fueron algunos de los dirigidos por los distintos partidos políticos de oposición a la última pirueta del jefe del Gobierno en esta cuestión.

El secretario general de Alianza Popular, Jorge Verstrynge, tras manifestar la oposición de su partido a la celebración del referéndum, en todo caso, dijo ayer que para complicar más la creación de conflictos sociales el presidente del Gobierno dice que la vinculación del resultado del referéndum para el Gobierno no está de acuerdo con lo establecido en los textos legales y en lo que es costumbre en una democracia tradicional, sino que se condiciona en una cifra de abstención. Esto es semejante a un circo, donde priva el más difícil todavía, y no es el camino aconsejable. Lo más sensato sería no mover lo que un día el pueblo español decidió democráticamente a través del Parlamento, es decir, permanecer en la OTAN".Javier Rupérez, encargado de temas internacionales del Partido Demócrata Popular, se mostró aún más duro en sus apreciaciones sobre la idea lanzada por el presidente González: "La filosofía que el presidente del Gobierno ha venido aplicando a la política exterior ha tenido siempre un carácter barroco. Con sus últimas declaraciones sobre los términos en que el referéndum de la OTAN tendría legitimación moral, Felipe González alcanza cimas sublimes de lo churrigueresco". Según Rupérez, "para justificar lo injustificable, es decir, la insensata promesa del referéndum, el presidente condiciona la validez de una consulta popular a grados y números de participación, sin otra lógica que la estimación de lo que al poder momentáneamente conviene".

Roca: "Pintoresco"

Miquel Roca, portavoz de la Minoría Catalana, señaló que "en el tema del referéndum cada día se dicen cosas más pintorescas; lo que acaba de decir el presidente no se sostiene. El referéndum se hace o no se hace, se acepta como consulta o no se acepta, pero que su valoración dependa del grado de participación, es un precedente realmente insólito".Igualmente insólitas parecieron las declaraciones hechas por González en el avión que le trasladaba, junto con los periodistas, a Estocolmo, a los dirigentes del Centro Democrático y Social que lidera Adolfo Suárez. Para José Ramón Caso, secretario general del CDS, estas declaraciones son "confusas", y además resulta "peligroso" poner como antecedente el artículo 151 de la Constitución, que ya

tuvo un efecto negativo al ser invocado tras los resultados del referéndum autonómico en Andalucía. "Eso fue el comienzo de la tumba de UCI), intentar contrariar la voluntad popular mediante un formalismo legal".

También las mesas pro referéndum de la OTAN criticaron duramente, en conferencia de prensa celebrada en Madrid, las declaraciones del presidente del Gobierno. En opinión de José María Mohedano, que actuó de portavoz en ausencia del presidente de las mesas, Ramón Tamames, las declaraciones de Felipe González "puede que sean ya un resultado del viaje del presidente norteamericano, Ronald Reagan, a Madrid, e implican una invitación a no participar en el referéndum, aunque sea de forma indirecta. El presidente del Gobierno", añadió, "exige la mayor participación electoral que se ha pedido nunca al pueblo español en una convocatoria".

Ramón Tamames manifestó en Jaén que las declaraciones de González "cada vez ofrecen menos credibilidad política". La nueva posición del presidente del Gobierno en torno a la OTAN fue calificada por Tamames como un paso atrás en el cumplimiento de la oferta y del contrato político electoral, "que llevó al triunfo a los socialistas en las elecciones de 1982", informa Javier Fuentes.