La maternidad

Después de leer la columna de Vicente Verdú titulada Madre, no puedo por menos que escribirle esta carta para expresar mi total desacuerdo con él.Todo lo humano, la maternidad incluida, es una forma de dar sentido y significado a cosas que, en gran parte, son funciones biológicas y naturales. Durante el embarazo y después de dar a luz, cada mujer se encuentra en la nada fácil situación de explicarse y explicar a los demás lo que está sucediendo. La mujer no es una gata que se limita a cuidar amorosamente de su cría -aunque muchos gestos y actitudes de la maternidad humana se parezcan a los de las hembras animales-, sino que permanentemente tiene que preguntarse cosas: ¿quién es este ser que tengo en mis brazos?, ¿para qué ha venido a este mundo?, ¿qué tengo yo que ver con él?, y tantas otras cuestioens y dudas, angustiosas unas, esperanzadas otras; cuestiones que, en definitiva, forman parte de lo que llamamos cultura. La lista de posibles ejemplos sería interminable, por lo que me limito a elegir uno: son cultura los movimientos por la paz, integrados en gran parte por mujeres que, con toda razón, no están dispuestas a que sus hijos sean muertos en estúpidas guerras.

Allí donde una mirada superficial sólo ve a una señora más o menos deformada y torpe a causa de su maternidad, en realidad se están fraguando ideas, proyectos y actos que son, en el sentido más auténtico y fértil de la palabra, cultura-