Rumanía y el desarme

En la concepción de Rumanía del presidente Nicolae Ceaucescu, evitar la guerra, poner término a la carrera de armamentos y comenzar el proceso de desarme -en primer lugar, el desarme nuclear-, pasar a una política de paz, independencia y colaboración constituyen el problema fundamental del mundo contemporáneo.Esta conclusión se fundamenta en el hecho de que, en los últimos años, la vida internacional ha ido conociendo una agravamiento sin precedentes. Se ha intensificado el peligro de que estalle una guerra mundial -que llevaría inevitablemente a una catástrofe nuclear-; se ha desarrollado la carrera de armamentos, sobre todo, nucleares; ,ha cobrado nuevas proporciones la política de fuerza, de amenaza con la fuerza y de mantenimiento y reparto del mundo en esferas de influencia. Una situación gravísima se ha creado en el continente europeo por el despliegue de los misiles nucleares norteamericanos de medio alcance en algunos Estados de la Europa occidental y por el paso a la aplicación de las contramedidas nucleares de respuesta por la Unión Soviética.

Señales esperanzadoras

En los últimos meses aparecieron ciertas señales de aflojamiento de la tensión internacional que dan ciertas esperanzas, como ha afirmado el jefe del Estado rumano, de que sería posible que se detuviera el curso peligroso de los acontecimientos. Rumanía ha saludado el acuerdo a que han llegado la Unión Soviética y Estados Unidos referente a la organización de negociaciones soviético-norteamericanas sobre algunos problemas importantes relativos a los armamentos nucleares y al espacio cósmico. Pero este acuerdo y el comienzo, el 12 de marzo del corriente, de dichas negociaciones no significan que los problemas gravísimos de la acumulación de nuevas armas hayan sido ya solucionados.

Claro, las declaraciones de intenciones y las propuestas que ambas partes han presentado son importantes. Pero no suficientes. Es necesario que se pase a medidas concretas de desarme. Así, sería necesario que se procediera sin tardanza al cese del emplazamiento de los misiles -norteamericanos de medio alcance y de la aplicación de las contramedidas nucleares soviéticas, realizándose unos acuerdos correspondientes para la retirada de los misiles y (le las demás armas nucleares existentes en Europa. Precisamente para que las negociaciones culminen con éxito es preciso que participen en ellas, de una forma u otra, todos los Estados europeos. Es muy necesario que los Estados participantes en el Tratado de Varsovia y los Estados miembros de la OTAN tengan un encuentro y contribuyan a esas negociaciones. "Europa", anotaba el jefe del Estado rumano, "a la cual la civilización le debe tanto, está desempeñando todavía un importante papel en la vida internacional. Ella puede aportar una importante contribución a la solución de los graves problemas del mundo contemporáneo".

Asimismo, es necesario que se intensifique la actividad en la conferencia de desarme de Ginebra, en las negociaciones de Viena para la limitación de las fuerzas armadas y los armamentos en la Europa central, en la Conferencia de Estocolmo sobre medidas de confianza y seguridad y sobre desarme, de manera que se llegue sin tardanza a unos acuerdos pertinentes acerca de los problemas en discusión.

Rumanía está actuando firmemente en el fomento de la colaboración en los Balcanes y por la creación en esta región de una zona exenta de armas nucleares y de bases militares extranjeras.

Rumanía considera que es sumamente importante poner término a toda acción de militarización del espacio cósmico, que acarrearía un inmenso peligro para la existencia de todos los pueblos de nuestro planeta. Tomando en consideración el hecho de que el espacio cósmico es un bien de toda la humanidad, se deberá buscar una reglamentación para su utilización por varios países con fines pacíficos. Se deberán iniciar negociaciones en este sentido para elaborar y firmar un tratado multilateral que constituya el código de conducta de los Estados en la exploración y explotación con fines exclusivamente: pacíficos del espacio cósmico. En la negociación de tal tratado, la responsabilidad debe ser asumida por la ONU. En este sentido, un papel importante incumbe a la conferencia de desarme de Ginebra, el único organismo multilateral (le negociaciones de desarme de las Naciones Unidas, en cuya agenda se encuentra, por lo demás, a partir del año 1982, un punto especial referente a la evitación de la carrera de armamentos en el espacio cósmico.

Además de las reglamentaciones jurídicas el tratado debería precisar también, en opinión de Rumanía, el marco institucional para el seguimiento de la aplicación del tratado y la creación de las condiciones necesarias para una colaboración armoniosa entre los Estados, en aras de la utilización del espacio cósmico con fines pacíficos. En este sentido, Rumanía ha propuesto la creación de un organismo especial de las Naciones Unidas llamado a conciliar las diversas demandas de índole política, jurídica, militar, así como económica o comercial, en base a la igualdad plena de todos los Estados.

Partiendo de la realidad, unánimemente reconocida, de que las negociaciones en torno a la eliminación de las armas nucleares de la Tierra y la protección del espacio cósmico de tales armas serán difíciles y complicadas, y que durarán mucho tiempo, el presidente Nicolae Ceaucescu lanzó un vibrante llamamiento para hacer cesar inmediatamente la implantación, la producción y la experimentación de nuevas armas nucleares, de cualesquiera acciones de militarización del espacio cósmico.

El jefe del Estado rumano pide que,en vez de hacer investigaciones para la militarización del espacio cósmico, de experimentar y fabricar nuevas armas de destrucción masiva, se financien la investigación para la defensa de la vida y del medio ambiente, el desarrollo económico y social, la prosperidad de los países en desarrollo. - Para ello es necesario que un equilibrio armamentista al nivel más bajo posible.