Los trabajadores de Astano deciden acogerse a los fondos de empleo
La asamblea de trabajadores de Astano acordó ayer por mayoría, a propuesta del comité de empresa y de la central Comisiones Obreras (CC OO), acogerse a los fondos de promoción de empleo, poniendo así fin a un largo período de oposición frontal en este astillero a los planes de reconversión. La posición de la Intersindical Nacional de Trabajadores Gallegos (INTG), que proponía intensificar las acciones de protesta, quedó en minoría. Aunque hasta este mismo jueves se mantuvieron las movilizaciones en el astillero (con un encierro en la factoría y cortes de tráfico en el exterior), CC OO, con 10 votos frente a 9 en el comité, consideró que era insostenible la postura de mantener el rechazo a la integración de los trabajadores excedentes en los fondos de promoción de empleo, reconociendo que son ya minoría los trabajadores que no se integraron. "No vamos voluntariamente a lo que para nosotros son bolsas de paro", dijo el presidente del comité de empresa, Xosé Santamaría, "sino forzados por la situación".
Santamaría aludió también a condiciones de "agotamiento y angustia, problemas psíquicos e incluso hambre y necesidades en familias que llevan meses sin ingresos", para justificar la decisión del comité de empresa.
La incorporación a los fondos puede suponer la readmisión de dos trabajadores que causaron destrozos en la sección sindical de UGT en Astano y la negociación de algunos puntos de régimen interno en la empresa con la nueva dirección. Para INTG el acuerdo de ayer es "un grave error y una derrota", y USO siguió proponiendo la firma de un documento con el PSOE para continuar negociando.
La conflictividad en Astano se inició en octubre de 1983, cuando el Instituto Nacional de Industria avanzó los planes de reestructuración en su división naval. El acuerdo firmado por la Administración y UGT para reconvertir los grandes astilleros', que establecía un excedente en Astano de 3.414 empleados -de un total de 5.600-, fue rechazado por los otros sindicatos representativos del sector (en Astano CC OO, USO e INTG) y en principio una mayoría de los trabajadores excedentes se negó incluso a aceptar las prestaciones de los fondos de promoción de empleo, que garantizan a los trabajadores excedentes por la reconversión unos ingresos de más del 80% de sus sairios reales durtante un período máximo de tres años.
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