Empleados y pacientes denuncian abusos deshonestos en el Hospital General de Valencia

La aparición de nuevas denuncias sobre presuntas irregularidades en el funcionamiento del Hospital General de Valencia ha agravado la crisis de imagen que padece esta institución desde hace algunas semanas. Las denuncias se encuentran en documentos, la mayor parte de los cuales consiste en comunicados de circulación interna del hospital, avalados con registro de entrada, fechados y firmados, y en los que diversos empleados y pacientes denunciaron ante sus superiores dos casos de abusos deshonestos cometidos por trabajadores contra pacientes internados, la aparición de un feto de 350 gramos en los lavaderos, la peligrosa manipulación de los tratamientos quimioterápicos por personal no especializado, el fallecimiento de una enferma en los pasillos del área de Urgencias y la negativa de una doctora a visitar a una enferma.Las irregularidades denunciadas, pertenecientes a un informe anónimo que circula por las redacciones de los periódicos, hacen referencia a hechos ocurridos entre julio de 1984 y febrero de 1985, con anterioridad a las destituciones y los nombramientos que afectaron a los directivos del hospital el pasado 22 de marzo.Según se deduce de la lectura del informe, al que ha tenido acceso este periódico, dichas irregularidades fueron silenciadas por los directivos del hospital, que prefirieron ocultar el escándalo. El actual subdirector médico del centro, José Antonio de Velasco, negó firmemente esta acusación, indicando que todas las irregularidades detectadas en el hospital "han sido siempre estudiadas atentamente y sancionadas cuando ha sido preciso", mostrándose indignado por lo que considera "campaña de desprestigio contra el centro".

Tanto Velasco como el presidente de la Diputación, Antoni Asunción, restaron importancia a las irregularidades denunciadas, afirmando que "este tipo de cosas, aunque punibles y graves, suceden con frecuencia en cualquier centro hospitalario y son difíciles de controlar, dadas las dimensiones de un hospital que cuenta con casi 1.900 trabajadores".

En cualquier caso, ninguno de estos hechos presuntamente delictivos fue denunciado a la justicia por sus víctimas, "que se contentaron con las explicaciones y excusas de la dirección del hospital General".

El equipo de dirección del centro, encabezado por el director general, José Antonio Díaz García Donato, dio a conocer hace dos días un comunicado en el que lamentan el "sensaciónalismo" con el que la Prensa ha tratado la situación del hospital, considerando que se trata de una "campaña interesada de desprestigio y manipulación procedente, en algunos casos, de simples intereses personales".

Sin citar nombres, el comunicado recuerda las últimas destituciones llevadas a cabo en la dirección M centro, que fueron la del anterior director de enfermería, Alfredo Elías, y sus adjuntos, y la M anterior gerente, Francisco Molins. Todos ellos fueron destituidos el pasado 22 de marzo, tras haber aparecido ciertas informaciones en la Prensa que les relacionaban con un presunto tráfico de armas, abusos sexuales y contrataciones irregulares de personal.

Querella contra el acusador

Alfredo Elías, por su parte, que rechaza absolutamente las acusaciones, ha presentado una querella contra el supuesto autor de las declaraciones anónimas que le inculpaban, el diputado provincial socialista Andrés Perelló, que había iniciado una investigación sobre la situación del hospital. Durante los últimos días, Elías mencionó la posibilidad de querellarse también contra el presidente de la Diputación, Antoni Asunción, argumentando que su destitución podría hacer suponer la certeza de las acusaciones que pesan sobre él.

Actualmente, la policía valenciana está concluyendo una investigación sobre las irregularidades en el hospital General, encargada por la Diputación Provincial, cuyos resultadas todavía no se han dado a conocer.