Las "buenas ideas" en política económica

Las "buenas ideas" de Turgut Ozal en política económica pasan por el liberalismo extremo. "La intervención del Estado debe ser mínima", asegura el primer ministro turco, cuya receta para problemas como el desempleo (superior al 20%).Y la inflación (cerca del 50%) es, corregir la balanza de pagos y, con ello, aumentar las inversiones. Ozal está orgulloso del incremento de las exportaciones. "Hace unos años", dice, "ascendían a 2.000 millones de dólares[unos 360.000 millones de pesetas], pero entre 1980 y 1984 llegaron a superar los 7.000 millones".

El pragmático jefe de Gobierno turco cree que "hay que dar oportunidad al pueblo de trabajar fuerte y conseguir buenos beneficios", y cita entre las buenas ideas que ha puesto en práctica la apertura a las importaciones y el empleo de los beneficios así conseguidos para programas sociales, especialmente en el campo de la vivienda.

Turgut Ozal asegura que tiene controlada la inflación y que este año será menor que la registrada en 1984. Asegura que ya está controlada y en pleno proceso de desaceleración. "Pero lo importante", dice, "es que prometimos que los ingresos no subirían menos que la inflación, y eso lo estamos cumpliendo". Sindicatos y oposición lo niegan.

El Gobierno está, se dice, muy cerca de las grandes empresas y muy lejos de las pequeñas. Turgut Ozal lo desmiente con un hecho: que el principal apoyo de su partido viene de artesanos, pequeños empresarios, tenderos y granjeros, aunque también de asalariados. "Las grandes compañías", asegura, "tienen muchos problemas con nosotros porque los tipos de interés son muy altos". Tampoco está de acuerdo, en que su Gobierno se vea beneficiado por las restricciones de libertades que, por ejemplo, pueden haber evitado una protesta popular contra la política económica.