Firma de un acuerdo de cooperación ferroviaria entre España y Marruecos

RabatEl presidente de la Renfe, Ramón Boixados, llegó ayer a Rabat para firmar un acuerdo de cooperación ferroviaria con el Organismo Nacional de Ferrocarriles Marroquíes, ONCF. Con el presidente de la Renfe han viajado a la capital marroquí su adjunto, Miguel Corsini, y Lorenzo González, subdirector general de Cooperación Técnica Internacional del Ministerio de Transportes.

España y Marruecos tienen en perspectiva dos importantes proyectos de cooperación en materia ferroviaria. El primero de ellos concierne a la electrificación de la línea férrea que va de Nouasser al puerto fósfatero de Jorf Tasfar. Este proyecto, ya firmado con el Gobierno marroquí, importa unos ocho millones y medio de dólares, algo más de 1.500 millones de pesetas, y será financiado con cargo a los 590 millones de dólares de ayuda financiera, entre créditos FAD (Fondo de Ayuda al Desarrollo), créditos de Estado a Estado, y créditos comerciales, que contempla el Convenio de Pesca firmado en agosto de 1983.

Pero, sin duda, el proyecto más importante en materia de cooperación ferroviaria es la construcción de la línea férrea que va desde los yacimientos y complejo siderúrgico de Taourirt, al puerto mediterráneo de Beni Anzar, en la región de Nador, junto a Melilla, para el cual el ministro de Transportes, Enrique Barón, prometió la financiación al 100%, también con cargo al acuerdo pesquero en vigor. La línea férrea Taourirt-Beni Anzar para la cual se espera una confirmación de la financiación española para fines de este mes, será sin duda el proyecto de mayor importancia llevado a cabo hasta ahora por España en Marruecos y su costo total se elevará a unos 170 o 180 millones de dólares, unos 32.000 millones de pesetas.

Este proyecto superará así en unos 30 millones de dólares la inversión ya contratada por España para la construcción y modernización del puerto de Agadir, que se eleva a 150 millones de dólares.

El grupo Focoex, Entrecanales y Sereland, serían encargados de la realización de estos trabajos, que tienen una gran importancia para Marruecos, ya que permitirán la evacuación de la producción de la sociedad nacional de siderúrgia marroquí, y el despegue de los planes siderúrgicos del país.