Luis Pizarro Fernández
Delegado de la universidad de Sevilla y líder del movimiento de protesta que ha sacado a 20.000 estudiantes a la calle
Luis Pizarro Fernández es el delegado de la universidad de Sevilla. Es, por tanto, cabeza visible de un movimiento de protesta que ha sacado a 20.000 estudiantes a la calle y ha creado curiosidad por el renacimiento de una protesta universitaria que se creía perdida. "Luchamos por preocupaciones muy directas de la Universidad, pero en esta lucha nos hemos encontrado con que la democracia formal no era lo que creíamos". No se imagina a los hombres que ahora ocupan los despachos corriendo delante de los grises, "porque hoy anteponen legalidad a legitimidad; anteponen el orden a la justicia".
Luis Pizarro nació en Fuentedecantos (Badajoz), el pueblo de Zurbarán, hace 24 años. Llegó a Sevilla hace 10. Entró en la Universidad "en plena bulla de la LAU. Eso me hizo interesarme por este tipo de cosas". Con el tiempo se fue metiendo más y más en cargos representativos, y finalmente los 22 delegados de centro del Consejo de Alumnos de la Universidad de Sevilla (CADUS) lo eligieron delegado. Ha sido, por tanto, cabeza del intenso movimiento universitario sevillano de estos días. Una manifestación no autorizada y disuelta con dureza, otra para la que los estudiantes obtuvieron permiso de la Audiencia, infligiéndole una derrota política al gobernador civil, dos acciones para impedir la reunión del claustro y una tercera fallida por la decidida intervención de las fuerzas del orden público constituyen el parte de guerra de estos días en los que el CADUS ha movilizado un pacífico ejército de 20.000 estudiantes."El movimiento universitario estaba muerto en España. Había curiosidad por saber qué tipo de resortes podían mover a los un¡versítarios ahora, con una democracia consolidada. En ese sentido a esta lucha la ha caracterizado el que peleábamos por cosas muy directamente nuestras. Pero en esta lucha nos hemos encontrado con que a la democracia formal nocorresponden las actitudes, por parte de las autoridades, que podíamos creer".
La lucha se concentraba en torno a la constitución del claustro: "El margen de representación de los alumnos era tan reducido que boicoteamos la votación. En ese claustro hay ahora 15 alumnos, todos colados por el Opus Dei, elegidos con una abstención del 99,3% Evidentemente, el alumno no está representado ahí. Pero explicas eso a las autoridades; socialistas y se refugian en que es legal y ya no hay forma de sacarlas de eso. Normalmente, además, empiezan por decirte en plan padre que te entienden, que ellos también corrieron delante de los grises. Pero ahora, arrellanado en el sillón, detrás de la mesa y en el despacho que ocupa, no puedes imaginar a Rodríguez de la Borbolla corriendo ante los guardias, por mucho que sepas que es verdad, que efectivamente lo hicieron".
¿Por qué en. Sevilla y no en otro sitio? "Porque Sevilla es una ciudad especial, que vota izquierdas pero que está controlada sectorialmente por pequeñas y mezquinas oligarquías, totalmente impermeables. Lo mismo ocurre en la universidad de Sevilla, controlada por un grupo de catedráticos.
"Ni yo ni ninguno de los que estamos en la cúpula del CADUS somos del PCE ni de ningún partido. Ni siquiera me ha tirado los tejos ninguno. Aquí se ha luchado sólo por una representación de los alumnos en el claustro".
Estudia quinto en la especiafldad de Medicina Social y no sabe si en el futuro se verá metido de lleno en la política. Lo único que espera es "no cambiar algún día tanto como los que ahora ocupan los despachos oficiales".
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